UAGA critica la rapidez para atajar problemas con la fauna en el ámbito urbano frente a la dejadez en el rural

La organización agraria critica que se desaloje una colonia de conejos del centro de Zaragoza cuando en el medio rural se han convertido en una plaga que causa cuantiosas pérdidas en cultivos e infraestructuras sin que la administración les ponga freno.

La superpoblación de conejos supone un quebradero de cabezas para los agricultores aragoneses.
La superpoblación de conejos supone un quebradero de cabezas para los agricultores aragoneses.
Raquel Labodía

La Unión de Agricultores y Ganaderos de Aragón, UAGA-COAG, manifiesta su indignación por la rapidez con la que se toman decisiones y se solucionan los problemas en el ámbito urbano con las plagas de animales silvestres.

Según indica la organización agraria en un comunicado, el pasado 14 de julio, el Ayuntamiento de Zaragoza, mediante un importante operativo, procedió al traslado de los 25 conejos que vivían en la glorieta de la Puerta del Sol para evitar problemas de seguridad en el tráfico de esa zona de la ciudad. Una medida que pone de manifiesto, según UAGA, el abandono que sufre el medio rural, donde los agricultores y agricultoras denuncian desde hace años los importantes daños y pérdidas que causa la plaga de conejos en infraestructuras y producciones agrarias y sin embargo no se dispone de medidas eficaces para su control.

UAGA-COAG señala que este caso es el claro ejemplo de la dejadez y de las diferencias entre el mundo rural y el mundo urbano. Mientras que en las ciudades se toman medidas para trasladar, e incluso eliminar, a las plagas de conejos, palomas, cotorras,… en el rural, la población es obligada a convivir con la fauna silvestre. Conejos, ciervos, jabalíes y lobos están poniendo en jaque la viabilidad económica de muchas explotaciones de cereal, de fruta y de ganado extensivo, causando enormes pérdidas a los profesionales agrarios sin que la administración autonómica ponga freno a esta situación o indemnice los daños.

A juicio de UAGA, este doble rasero se aplica en muchísimos ámbitos, no solo en el control de la fauna silvestre. Así, la diferencia de trato también queda patente en lo que se refiere a la limpieza del río Ebro y a los tratamientos contra la mosca negra. El cauce del río, a su paso por el centro de Zaragoza, está limpio, sin maleza o acumulación de grava, y además se aplican reiteradamente productos larvicidas para combatir la mosca negra. Sin embargo, los agricultores y agricultoras de la Ribera Alta y Baja denuncian continuamente la situación de abandono del cauce del río y la proliferación de mosca negra. Otra plaga que está causando graves perjuicios a los ganaderos y ganaderas de ovino.

Conejos en la rotonda de la Puerta del Sol de Zaragoza antes de ser reubicados

Por estos motivos, UAGA-COAG acusa a los dirigentes políticos de tener doble moral y les exige que consulten a las organizaciones agrarias y demás entidades del ámbito rural para adoptar medidas que sean acordes a la realidad del sector.

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