terrorismo
Francia entregará a Ata en los próximos días para ser juzgado por el asesinato de Giménez Abad
La vista oral comenzará en la Audiencia Nacional el 3 de julio con la declaración de los dos terroristas acusados (Mikel Carrera y Miren Itxaso) y Borja Giménez, el hijo del político aragonés que lo acompañaba el 6 de mayo de 2001.
La Justicia francesa ha decidido entregar en los próximos días al etarra Mikel Carrera Sarobe, alias 'Ata', ex jefe de la banda terrorista ETA, a las autoridades españolas para que sea juzgado, junto a la terrorista Miren Itxaso Zaldua, por el asesinato del presidente del PP en Aragón, Manuel Giménez Abad, de 53 años, que se produjo en Zaragoza el 6 de mayo de 2001.
Fuentes jurídicas confirmaron a HERALDO que, con esta decisión, Francia emitirá la Orden Europea de Detención y Entre (OEDE) para que Ata pueda ser entregado a la Policía española y trasladado a una de las prisiones situadas en Madrid para estar cerca de la Audiencia Nacional. En estas dependencias será juzgado por el asesinato del político aragonés. En principio, el tribunal ha reservado seis días de julio (3, 4, 5, 6, 17 y 18) para la celebración de la vista oral.
El terrorista cumple cadena perpetua en Francia por el asesinato de los guardia civiles Raúl Centero y Fernando Trapero en la prisión de Lannemezan (Francia), cerca de Tarbes, en el sur del país. Ese crimen, cometido el 1 de diciembre de 2007, provocó su detención en el país vecino y su condena por el Tribunal de lo Criminal de París.
Mientras tanto, la etarra Miren Itxaso Zaldua, alias Sahatsa, está interna en la cárcel de San Sebastián, desde que fue detenida hace tres años en Hernani, en julio de 2020, tras ser identificada por un testigo y la Policía encontró nuevos indicios en la documentación de la banda entregada por Francia en 2018.
Petición fiscal de 30 años
La Fiscalía de la Audiencia Nacional pide 30 años de prisión para los dos miembros de ETA por el crimen cometido en la calle de las Cortes de Aragón de Zaragoza, cuando Manuel Jiménez Abad iba con su hijo Borja a ver un partido del Real Zaragoza contra el Numancia en La Romareda.
El asesinato, cometido poco antes de las elecciones del País Vasco en 2001, conmocionó a Aragón, donde se produjo la manifestación más multitudinaria de la historia, y a todo el país.
La fiscal Ángela Gómez-Rodulfo concluyó que los dos etarras acusados “habían diseñado" el atentado contra el político aragonés "y lo ejecutaron concertadamente”. Fue asesinado sobre las 18.30 “por la espalda y a bocajarro” por el etarra Ata que le disparó tres tiros que acabaron con su vida, “mientras caía y cuando ya se encontraba tirado en el suelo”.
En la petición fiscal se les reclama una pena de inhabilitación para prohibirles aproximarse a Zaragoza, a menos de un kilómetro, durante cinco años después de cumplir su pena. En el relato del Ministerio público señala que el asesinato se produjo en presencia de su hijo y que los dos etarras huyeron del lugar por la calle Princesa hasta la avenida Goya, según la Policía.
