José María de Teresa: "Usaremos un cuchillo con un filo de un átomo"
El científico profundiza en la trascendencia de la nanociencia y en los códigos éticos que lleva consigo el progreso científico.
Lo nano cada vez es más importante…
¿Definimos primero nanómetro?
Convendría…
Un nanómetro es la millonésima parte de un milímetro.
Apenas nada…
Pero es importantísimo: cambian las propiedades de los materiales. Además, la miniaturización: avances en microsensores, más dispositivos en el mismo espacio.
¿Qué se lleva usted entre manos ahora mismo?
En Zaragoza estamos instalando el equipo de nanofabricación de más resolución que existe. Podremos focalizar un haz de iones de helio en 0,5 nanómetros. Imagínese el filo de un cuchillo de 0,5 nanómetros.
Imperceptible por el ojo humano…
Usaremos un cuchillo con un filo de un átomo. Y con él podremos cortar o bien añadir material.
¡Sensacional!
El proyecto cuesta dos millones de euros, financiado por el CSIC y el Ministerio a través de fondos Next Generation. También hemos solicitado un proyecto para mejorar los implantes cocleares.
Coclear: de cóclea, oído interno.
Así es. Tiene forma de caracol, está hueca. Llega el sonido, mueve los cilios, y ese movimiento excita el nervio acústico, que traslada la información al cerebro.
¿Qué mejora se experimenta con el invento?
Con los aparatos actuales se perciben 22 frecuencias. Con la nueva tecnología, 3.500.
El oído es el primer sentido que desarrolla el feto…
Correcto. Y es casi instantáneo.
El sonido, la palabra. No existe el pensamiento no lingüístico. Nadie puede pensar de un modo abstracto sin auxiliarse de las palabras, sin que las palabras resuenen dentro de su cerebro.
Esa es la trascendencia del oído.
Ya hay máquinas que hablan. Y piensan…
Claro. El 30 de noviembre de 2022 se hizo disponible el Chat GPT. Es la primera vez que se pone a disposición del publico general una herramienta de diálogo tan potente con una máquina. Existían otras máquinas, pero nada comparable.
Diálogos con una máquina como si fuera una persona…
Casi no duermo desde esa fecha. Es una revolución. Está basado en un programa informático que funciona como nuestro cerebro.
Más de 86.000 millones de neuronas cobija el cerebro humano…
Y cada neurona cuenta con 10.000 conexiones con otras neuronas. Esta herramienta ya ha tenido 100 millones de usuarios. Yo ya he dialogado con Chat GPT. Incluso puede sustituir a un periodista.
¿Sí…?
Yo le pedí 10 preguntas para entrevistar a Elon Musk.
A ver si entro yo también y mejoro las preguntas que hago en mis entrevistas…
¡Ja, ja, ja!
¿Qué pensaría Ramón y Cajal de todo esto?
Sería crítico. Estas herramientas son cajas negras. Funcionan, pero no sabemos ni cómo ni por qué. Son programas que hay que entrenar con datos. Hace dos semanas apareció en ‘Nature’ un artículo donde en un estudio se ha visto que un programa de inteligencia artificial reconoce defectos en el corazón mejor que un médico ecógrafo. Pero ¿quién decide si se opera, la máquina o el médico?
Desafío ético a la vista.
El futuro es éste. La Unión Europea va a ser la primera en regularlo. Porque cada vez cuesta más diferenciar lo real de lo virtual. Su línea de separación está cada vez más difuminada.
Volvemos a los nanómetros…
Los niños que nacen ahora crecen teniendo dificultades para separar al hombre de la máquina. Nos acercamos a ‘Blade Runner’…
Decía que la UE será la primera en regularlo. Conocemos la ética occidental, pero en el mundo aparecen otros poderes…
Muy buen apunte. Ya conocemos EE. UU. y Europa, pero China tiene una regulación menos estricta en aspectos éticos. Y China será la primera potencia mundial a la vuelta de esquina, en 2035...
