UAGA pide cuatro excepciones a la PAC ante la dificultad para cumplir requisitos por la sequía
En una reunión con el consejero de Agricultura plantea medidas para aliviar los graves problemas de renta del sector.
Los responsables de UAGA llegaron ayer al despacho del consejero de Agricultura con una batería de reivindicaciones muy concreta que consideran necesaria y urgente para "aliviar los problemas de renta que van a tener los agricultores y ganaderos durante esta campaña", amenazada por los graves efectos que sobre los cultivos comienza a causar la sequía.
La junta directiva de la organización agraria, con su secretario general a la cabeza, José María Alcubierre, pone el foco de las actuaciones en una nueva PAC, en vigor desde el 1 de enero de este año, que ha llegado con nuevos y exigentes requisitos medioambientales si se quiere cobrar una buena parte de las ayudas directas. Y ante la previsible imposibilidad de poder cumplirlos si persiste la ausencia de lluvias, UAGA ha planteado cuatro excepcionalidades.
Uno de ellos hace referencia al ecorrégimen que exige una rotación anual de cultivos de cultivos que incluya especies mejorantes, como es el girasol y las leguminosas. La organización agraria propone que el barbecho sea considerado un cultivo mejorante en aquellas zonas en las que no hay suficiente dotación de agua o la tierra está muy seca.
Solicita también que se permita enterrar las leguminosas antes de llegar a la floración, dado que la carestía de agua está condicionando el desarrollo de la planta que no está echando flor.
Su tercera excepcionalidad tiene la mirada puesta en la ganadería extensiva y los sobrecostes a los que tiene que hacer frente ante la falta de pastos. Para compensar la situación, UAGA pide que sea posible el aprovechamiento de todos los cultivos que no se van a cosechar para la alimentación de los animales, tanto a diente como por medios mecánicos (pudiéndolo segar para embalar o ensilar).
Dado que los compromisos de siembra para acceder a las ayudas agroambientales se definen este ejercicio -y servirán de referencia en los próximos años-, UAGA considera que mermará el cobro de los productores de arroz que se van a ver obligados a reducir la superficie de cultivo por la escasa disponibilidad de agua. Por eso, su cuarta excepcionalidad incide en dejar abierta la posibilidad de ampliar en 2024 la superficie del compromiso.
Un informe técnico
Tras el encuentro, los representantes de UAGA explicaron que el consejero de Agricultura reconoce la situación tan preocupante que vive actualmente el campo por la sequía y coincide con la organización agraria en el problema de renta al que se van a enfentar los profesionales si la situación no revierte. Detallaron que, sin embargo, Olona les trasladó que no es posible adaptar la PAC a las condiciones de la sequía ya que los cumplimientos agroambientales están fijados por Europa y el Ministerio de Agricultura.
Pese a ello pidió a UAGA, siempre según sus representantes, que realice un informe técnico identificando con precisión los problemas que se están produciendo o se van a producir para cumplir con los compromisos que exige la nueva PAC.
Los máximos dirigentes de la organización detallaron además que el consejero manifestó durante el encuentro que lo fundamental para su departamento es asegurar el cobro de la PAC a los agricultores y ganaderos e insistió en que aquellos requisitos que se incumplan por la sequía se puede justificar con fotografías georreferenciadas y facturas de compra de insumos.
Durante la reunión, UAGA puso además sobre la mesa la necesidad de adoptar medidas de tipo fiscal, pero también la revisar las línea de seguros agrarios de producción o integral, así como habilitar ayudas directas "para todos los cultivos afectados, para la ganadería extensiva -por lo gastos en alimentación y agua- y para la intensiva -por la compra de paja- y especialmente al sector apícola que lleva tres campañas sin cosecha".
