Arrecia el primer temporal del invierno con alerta de nevadas en cotas inferiores a los 300 metros
La nieve complica el tráfico en la red viaria de Huesca y obliga a suspender varias rutas escolares en la provincia. El Ayuntamiento oscense activa el Pemuvi ante el aviso de la Aemet, que prevé además un descenso de las temperaturas.
La cota de nieve bajará desde los 1.200 metros a cualquier altitud y las temperaturas mínimas descenderán. Es la previsión para este martes de la Aemet, tras la llegada este lunes del primer temporal del invierno a la provincia de Huesca. Las borrascas complicaron la circulación en más de 20 tramos de la red viaria y obligó a suspender varias rutas escolares en las comarca más septentrionales. Además, dejó espesores de casi 50 cm en las cotas más altas de las estaciones y de casi 30 cm en Jaca. También se produjeron cortes de luz en diferentes zonas del Alto Aragón.
El Ayuntamiento de Huesca ha convocado a primera hora de este martes a responsables de diferentes áreas municipales para abordar el Plan Municipal de Vialidad Invernal (Pemuvi), tras la previsión facilitada por la Agencia Estatal de Meteorología, que alerta de nevadas en "cotas inferiores a los 300 metros", según indicó este lunes el alcalde, Luis Felipe.
Desde la Oficina de Montaña de Jaca se comunicó que continuará nevando durante los próximos días, con aumento del viento de noroeste importante, lo que complicará "más la situación para circular, tanto en montaña, como por carretera". "El peligro de aludes aumenta considerablemente", añadió la entidad.
Este lunes, las máquinas quitanieves empezaron a trabajar a primera hora para facilitar en lo posible el paso de los vehículos por las carreteras. Por la mañana, la circulación de camiones quedó interrumpida en la autovía A-23, a la altura de El Temple, donde estos fueron embolsados poco después de las 11.15, informó la DGT.
A lo largo de la tarde también se retuvieron camiones en Nueno y en Hostal de Ipiés. Al cierre de esta edición había alrededor de 25 tramos de carreteras con restricciones. Tanto en la red nacional como en la autonómica era necesario llevar cadenas o neumáticos de invierno.
Debido a las nevadas se suspendieron varias rutas de transporte escolar, total o parcialmente. La comarca de la Jacetania fue la más afectada, con 200 alumnos que no pudieron ir a clases.
En la zona del Sobrarbe, se suspendieron 13. Unos 100 estudiantes no pudieron acudir a su centro educativo, como los del instituto de Secundaria de Aínsa y algunos de los centros de Educación Infantil y Primaria.
En Ribagorza salieron todos los autobuses, pero nueve alumnos del IES y el CEIP de Graus no llegaron a clase por complicaciones en las rutas de Aldea Puy de Cinca, Panillo y Caneto. En el Alto Gállego, el transporte escolar no pudo recoger a 19 escolares que van a Sabiñánigo en las paradas de La Guarguera, Caldearenas e Ibor. También resultaron afectados los trayectos de Aineto y Caldearenas, con más de 20 alumnos. En la Hoya de Huesca se suspendió la ruta de La Peña a este lunesbe, con seis alumnos.
Por la noche seguía nevando copiosamente en algunas zonas de la provincia por lo que no se descarta que este martes se produzcan nuevas suspensiones.
Apagones de luz
La nieve provocó incidencias en la red eléctrica, sobre todo en la zona norte de la provincia. A lo largo del día resultaron afectados unos 1.400 hogares. La mayoría de los cortes del suministro, con diferentes intensidades, ocurrieron a partir de las 10.30, cuando arreció la nevada. Se produjeron en Jaca, Sabiñánigo, La Guarguera, Caldearenas, Nocito, Las Peñas de Riglos, Fanlo, Puértolas, Broto, Fiscal y Yebra de Basa. Las averías podrían deberse a la caída de ramas o árboles sobre las líneas por el peso de la nieve, indicaron desde Endesa.
La borrasca dejó, además abundante lluvia en la provincia. Las precipitaciones registradas en los últimos días se han notado en el embalse de Yesa, en el río Aragón, según informaron desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Este pantano ha pasado de la situación de emergencia a la de alerta.
Las cuencas del Gállego y el Cinca también incrementaron los niveles durante la semana pasada y la anterior. La llegada de este nuevo frente ayudará a aumentar los caudales almacenados en las presas así como las reservas de nieve en la montaña.
