Un turno de trabajo en el 061 con canapés y uvas entre avisos urgentes

Los trabajadores en activo en este servicio despedirán el año compartiendo platos fríos si las llamadas lo permiten.

Interior del Centro Coordinador de Urgencias (CCU) del 061 con decoración navideña.
Interior del Centro Coordinador de Urgencias (CCU) del 061 con decoración navideña.
Guillermo Mestre

El servicio 061 Aragón no descansa. Y en Nochevieja seguirá activo para atender los avisos y las salidas de emergencia. La sala del Centro Coordinador de Urgencias, desde su sede situada en el centro de especialidades Inocencio Jiménez de Zaragoza, con decoración navideña acorde con estas fechas, prevé recibir numerosas llamadas de los ciudadanos. Así que quienes trabajen en esta jornada tan especial compartirán platos fríos e intentarán también comerse las tradicionales uvas de la suerte, si los teléfonos lo permiten.

Isabel Gállego, directora médica del 061 Aragón, reconoce que el momento más tranquilo es de las 21.00 a las 22.00, cuando la gente prepara el menú y se empieza a sentar a la mesa. Tal y como destaca, los profesionales de este servicio son "excelentes y están preparados para todo". Entre el personal en activo han comprado la cena para despedir el año.

Los médicos Soledad Ibáñez e Ignacio Sainz de Robredo trabajan este sábado. La primera, en turno de mañana, y también el 1 de enero; y el segundo, por la noche: "Organizaremos un pequeño picoteo entre los que estemos y cuando podamos tomaremos algo e intentaremos comer las uvas, si nos dejan". Serán canapés fríos y embutidos, platos fáciles y rápidos de comer. "Suele ser una noche muy intensa", reconocen. La pasada Nochevieja, por ejemplo, hubo 1.768 avisos; y el 1 de enero de 2022, 1.978. 

El doctor Eduardo Ramos, que acumula ya varias Nocheviejas en activo en el servicio del 061 Aragón, recuerda que en el último fin de año que le tocó trabajar durante las doce campanadas les entró una llamada de una señora por un malestar leve. "Intentas celebrar justo ese momento, y luego cada uno a su puesto", apunta. "Es lo que toca", coinciden todos. Los enfermeros Arturo Buzón y Natalia Escayola están concienciados de trabajar algún día especial en Navidad. El primero, por ejemplo, estuvo activo la Nochebuena en la UME de Teruel. Cenaron a las 21.30, en previsión de lo que pudiera pasar. Después, tuvieron que acudir a un aviso a las 0.30 y hasta las 7.15 no regresaron.

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