Stellantis pretende usar 9 días de vacaciones en Figueruelas antes de aplicar el ERTE para afrontar la falta de piezas
Los sindicatos piden mejorar las condiciones del expediente de regulación temporal de empleo y que no se aplique a los operarios que no deseen acogerse
Pocos días quedan para terminar de negociar el nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) en la planta zaragozana de Stellantis. En principio habría de tiempo hasta el viernes, último día en que trabaja la factoría en lo que queda de año, pero podrían cerrarlo ya este miércoles dado que ayer la compañía puso encima de la mesa su propuesta. Utilizar los primeros nuevos días de vacaciones para afrontar la crisis de suministro de semiconductores antes de acudir al ERTE o medidas de flexibilidad, así como complementar los días que haya que aplicar de paro hasta el 80% del salario bruto y de las pagas extra son otros puntos de su propuesta.
La compañía planteó también la utilización de la bolsa de horas y vacaciones en las mismas condiciones que este año y un ERTE con número similar de días, 60, al de este 2022 o 300 turnos de trabajo, con una afección máxima de 80 días por operario.
Asimismo, Stellantis comunicó a la representación de los trabajadores su intención de excluir del ERTE a los empleados veteranos con jubilación parcial (relevados) mientras que los nacidos en 1962 tendrían las posibilidad de acogerse al ERTE o utilizar la flexibilidad interna. Las mismas opciones se ofertan a los trabajadores temporales al 100%.
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La compañía no quiso desaprovechar esta reunión de negociación del ERTE para hacer ya un planteamiento sobre las vacaciones colectivas del año que viene que cogerían como es tradicional en los últimos años desde el 31 de julio al 18 de agosto y en el caso, precisaron estas fuentes, de que «fuera necesario modificar las fechas de cierre de planta, por circunstancias excepcionales o imprevistas, se comunicaría a la mayor brevedad al comité» al objeto de llegar a un acuerdo.
Desde la representación de los trabajadores insistieron en la necesidad de mejorar las condiciones de este expediente de regulación temporal de empleo que sería ya el tercero que utiliza Stellantis para aminorar el impacto de la falta de piezas (el primero fue en 2020 por causa de fuera mayor), y que la compañía acepte la voluntariedad, es decir, que «exista la posibilidad de inaplicación del ERTE a los empleados que o deseen acogerse a las condiciones generales que se pacten». Asimismo desde la parte sindical, proponen que a los empleados con contrato de relevo parcial se les incluya en el ERTE o se les aumente el porcentaje del 80% que se les garantiza». La próxima reunión entre las partes es el miércoles.
Algunos sindicatos integrantes del comité dijeron entender la necesidad de aplicar un ERTE al año que viene, pero «no que deba seguir ligado al uso de la flexibilidad» y consideraron además «insuficiente» el complemento que ofrece para los días de expediente una empresa que no «deja de aumentar sus beneficios año tras año».
Rubén Alonso, presidente del comité de empresa, de UGT, destacó que los sindicatos lo que han pedido es mejorar las condiciones del ERTE y que haya posibilidad de descolgarse de su aplicación, es decir, que fuera voluntario y ha anticipado que se vuelven a juntar mañana con la dirección de Stellantis.
Además del ERTE pendiente, habrá que acordar también las vacaciones colectivas propuestas por la empresa. Y seguramente ya queden como tareas pendientes para el año próximo (se reincorporan en principio al trabajo en la factoría el 3 de enero) la negociación del próximo convenio colectivo de la planta, así como acabar de acordar el ERE de extinción que afecta a una treintena de personas veteranas de oficinas.
Está convocada también este miércoles una reunión específica en la que sindicatos y dirección hablarán de la intención de bajar la velocidad de la línea 1 para poder adaptar mejor la producción a la disponibilidad de las piezas.
