La noche más corta del año volverá celebrarse al calor de las hogueras tras el parón impuesto por la covid-19. La noche de San Juan es una ocasión para revivir viejas tradiciones en muchos pueblos de Aragón, que guardan con especial cariño estas costumbres a medio camino entre lo mágico y lo entrañable. El fuego tiene mucha presencia, en formas diferentes, pero también hay otras acciones que tienen que ver con los baños de agua con sal, las velas de distintos colores según el objetivo que se tenga al encenderlas y las infusiones de hierbas.

Decenas de hogueras

El Ayuntamiento de Zaragoza ha autorizado once entre este jueves y el sábado, con actos en Las Delicias, La Jota, Casablanca, La Almozara o la plaza de San Francisco, entre otros puntos. Las altas temperaturas han obligado a cancelarlas en municipios como Barbastro, pero en Zaragoza -donde se registrarán máximas de unos 32 grados, muy alejadas de los 41 del pasado fin de semana- los planes siguen adelante. El regreso no estará, sin embargo, exento de polémica. La Asociación de Vecinos de La Paz protestará este viernes en su parque, donde tradicionalmente encendían su hoguera de San Juan, ante la imposibilidad de volver a hacerlo en esta ocasión.

Tampoco hay que olvidar las fallas de San Juan, que se celebran en 69 localidades pirenaicas de Aragón, Cataluña, Andorra y Francia. En Aragón son nueve, pertenecientes a los municipios de San Juan de Plan. Bonansa, Sahún, Montanuy (3) y Laspaúles (3).