Cientos de personas llegadas de 22 poblaciones de cinco comunidades autónomas apuran las últimas horas en Alcorisa donde se han reunido durante tres días en las XXXV Jornadas Nacionales de Exaltación del Tambor y el Bombo. Tras dos años sin celebrarse por la pandemia, la cita parecía que no iba a llegar, y aunque la lluvia no lo ha puesto fácil, al final ha salido adelante. Estos toques están protegidos por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad y este fin de semana se está demostrando que le queda larga vida.

Esta pasión y saber hacer con palillos y mazas se evidenció ayer por la tarde en el acto central, cuando se celebró la exaltación de los toques de todos los grupos en el frontón, un espacio que está a cubierto, aunque el desfile de la mañana tuvo que aplazarse por la lluvia. La necesidad de modificar el programa por el tiempo no mermó mermó las ganas de tocar y los grupos buscaron los rincones para seguir redoblando juntos tras dos años de espera.

Estas ilusión de la familia tamborilera se notó ayer en las calles y plazas pero ya se quedaba clara a primera hora de la tarde del viernes con la llegada de las primeras delegaciones de Aragón, Comunidad Valenciana, Andalucía, Castilla-La Mancha y Región de Murcia. La expresión más pronunciada fue «al fin», dado que el tambor es símbolo de unión. De hecho, el lema de Alcorisa es ‘El toque que nos une’.

«El tambor une, el tambor es un sentimiento y hemos creado una gran familia, que es lo más importante», dijo el presidente del Consorcio Nacional, Antonio Mesa, visiblemente emocionado durante todo el fin de semana. Tampoco Miguel Iranzo, el alcalde anfitrión, disimulaba su estado de ánimo y aseguraba estar «muy contento». «Muchos alcaldes y concejales no nos conocíamos y ya era hora de que nos pusiéramos cara después de dos años hablando mucho por teléfono y siempre por cosas malas, es un gran fin de semana y ni la lluvia nos está frenando», añadió.

Ayer también se inauguró el Monumento al Tambor, que se colocó en la plaza de las Escuelas en 2020 y se pudo colaborar además en una buena causa. En la misma plaza, varios cortadores de Jamón DO Teruel dispensaron platos junto a la junta local de la AECC, ya que todos los beneficios obtenidos de la venta será para colaborar en la investigación del cáncer. «Nos lo propuso el Ayuntamiento y todo lo que sea conseguir fondos para esta causa nos parece siempre buen momento, y de momento, está yendo muy bien, estamos muy contentas con la respuesta», dijo la presidenta de la AECC en Alcorisa, Rosa García.