Aragón
La cifra de alumnos en los comedores escolares de Aragón es aún inferior a la de antes de la covid
Cerca de 32.000 escolares utilizaban el servicio en el curso 2019-2020, y en la actualidad son 28.357.
La pandemia ha traído consigo un descenso en el número de niños de los comedores de los colegios y un parón en el plan de instalación de cocinas ‘in situ’ que el Gobierno aragonés puso en marcha en el curso 2018-2019 y en el que muchas familias confiaban para desterrar el cáterin de línea fría. Actualmente hay 28.357 alumnos de centros públicos que comen en sus escuelas, frente a los 31.971 que lo hacían en el curso 2019-2020 en el que hizo su aparición el coronavirus y los 21.811 del pasado, según los datos facilitados por Educación.
El temor a los contagios está detrás de la caída de un tercio de usuarios del curso pasado, pero aunque el uso de este servicio se ha recuperado todavía es un 11% inferior. Desde la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de la Escuela Pública, su gerente Nieves Burón señala que hay otros factores que provocan en este descenso. Por "precaución" algunos padres siguen prefiriendo llevar a sus hijos a casa a la hora de la comida. Para Burón también puede haber influido el descenso de la población escolar. Habrá que ver si el próximo septiembre se vuelve o no a las cifras prepandemia. La afluencia a este servicio también podría resentirse por el cada vez mayor peso de la jornada continua, que supone centralizar las clases por las mañanas. No obstante, entre el curso 2015-2016 y el 2017-2018 los comedores ganaron 922 usuarios, pasando de 30.089 a 31.011, lo que supuso un incremento de un 3%.
Las becas de comedor también han caído. Un total de 10.130 escolares de centros sostenidos con fondos públicos cuentan actualmente con esta ayuda de la DGA de 860 euros por beneficiario y curso completo. Se trata de 729 menos que el pasado, cuando fueron 10.859. Este descenso coincide con la caída también de las solicitudes en los últimos años. En el curso 2019-2020 hubo 11.452 beneficiarios y en el 2018.2019 la cifra e elevó a 11.811. Para la gerente de Fapar puede tratarse de un efecto positivo de la mejora de la economía, por lo menos hasta antes de la crisis sanitaria.
"Al menos hay 35 colegios en lista de espera para que Educación valore la adecuación de una cocina propia", estima Pablo Alconchel, portavoz de la Plataforma por unos Comedores Públicos de Calidad. Este colectivo lleva tiempo inmerso en una cruzada para conseguir una buena alimentación para los escolares. Alconchel critica que de las primeras cocinas "comprometidas" por la DGA aún están por acometer las de los colegios Parque Goya y Valdespartera 1 de Zaragoza. "Entendemos que ha habido otras prioridades, pero la partida específica ha desaparecido de los presupuestos y no confiamos en que este tipo de actuación se acometa con fondos europeos", asegura.
La ampa del Valdespartera empezó en 2017 a mover ficha para la transformación de su cocina y siguen esperando. Representantes de las familias se han reunido con la directora provincial de Educación y la conclusión es que "todo continúa paralizado", señalan desde la asociación. El comedor lo utilizan 445 alumnos de forma fija en dos turnos y también reclaman su ampliación.
Alconchel recuerda que están a la espera de la licitación del servicio de comedor de los colegios zaragozanos y de conocer si Educación ha incluido "algunas mejoras" en los pliegos de condiciones, como la inclusión de las ratios de personal en cocina "que ahora no existen" y de más productos "de calidad y ecológicos" en los menús. Desde la Plataforma por unos Comedores Públicos de Calidad se ha iniciado una campaña para reclamar que los padres puedan conocer de forma clara y precisa toda la información sobre los productos que se sirven a sus hijos y tengan acceso al etiquetado correspondiente con toda la información alimentaria.
