Las librerías se quejan del retraso de siete meses para cobrar las becas de libros

La demora de los pagos por parte de la DGA se repiten año tras año y reclaman que se agilice su tramitación.

Libros de texto en la Librería General de Zaragoza.
Foto de archivo de libros de texto en una librería de Zaragoza.
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Las librerías aragonesas van a tardar siete meses, por lo menos hasta el próximo abril, en cobrar las becas de libros de texto que se entregaron el pasado septiembre coincidiendo con el inicio del curso escolar. Esta demora afecta a medio centenar de establecimientos y el montante que se les adeuda calculan que ronda los 2,3 millones de euros. La situación provoca las quejas del sector, que ha tenido que adelantar el dinero para abonar el material curricular a las editoriales y pagar a principios de este 2022 el IVA correspondiente.

No es un contratiempo nuevo, sino que se repite año tras año. El presidente de la Federación Aragonesa de Gremios y Asociaciones de Librerías (Fagal), Óscar Sanmartín, explica que el problema radica en que desde que en 2011 se puso en marcha el sistema de becas para material curricular la partida presupuestaria del Gobierno aragonés para financiarlas "se imputa al ejercicio siguiente, con lo que es necesario que primero se apruebe el presupuesto para iniciar toda la tramitación". Las cuentas de la Comunidad recibieron luz verde a finales del año pasado y no ha sido hasta febrero "cuando Intervención ha abierto para cargar las facturas". "En ese momento se produce un atasco en el servicio y provoca que las liquidaciones se dilaten en el tiempo", señaló Sanmartín.

Desde el Departamento de Educación explicaron que en estos momentos se está llevando a cabo "toda la tramitación" y se prevé que se pagará el "montante entero" en abril, como ocurrió el año pasado. Desde el sector apuntaron que finalmente recibieron el dinero en mayo. Se da la circunstancia de que en 2021 Educación liberó el pago del 10% de las facturas recibidas, un adelanto que este año no se ha llevado a cabo.

En 2020, el Ejecutivo autonómico también abonó a mediados de abril el último pago pendiente por estas becas de libros de texto tras la reclamación de Fagal, compuesta por las asociaciones provinciales de Zaragoza, Huesca y Teruel. Los tres abonos anteriores se habían hecho entre enero, febrero y marzo. Entonces se justificó este retraso por el "parón" administrativo provocado por la crisis del coronavirus pese a ser considerado como "procedimiento esencial y prioritario".

Para el presidente de los libreros aragoneses la solución "ideal" sería que un ejercicio Educación doblara su partida destinada a las becas de material curricular "para que se pusieran al día y pagaran en el año fiscal". No obstante, reconoce que esta operación financiera resulta "casi imposible". Por ello, lo que reclama el sector es que estos abonos "se prioricen y Tesorería los abone lo antes posible una vez que se apruebe el presupuesto autonómico".

Sanmartín recordó que la mayoría de las librerías han adelantado el dinero a las editoriales "gracias en algunos casos a préstamos". A muchos negocios no poder disponer de estas cantidades les impide "llevar a cabo iniciativas de renovación y actualización de fondos que se suelen llevar a cabo en los primeros meses del año". "Cuando cobramos estamos ya preparando la campaña escolar del siguiente curso", lamentó Sanmartín.

Un 13% menos de ayudas

Educación ha dado este curso becas de material escolar a 14.057 alumnos, un 13% menos de beneficiarios que el año anterior. La razón es que 62.000 familias han preferido acceder directamente al banco de libros, una opción que la consejería que dirige Felipe Faci permitió por primera vez. El BOA publicó este miércoles la resolución de estas ayudas que se convocaron el pasado junio.

Cada vez son más las familias que se decantan por el banco de libros. Los escolares reciben los lotes de ejemplares por 20 euros en primaria (desde el 3º curso) y 25 en secundaria (de 1º a 4º de la ESO). Las cuantías de las becas son de 160 euros para primaria y 230 para secundaria. Muchos padres con hijos de secundaria optan por el banco de libros ya que con 230 euros no cubren todos los volúmenes que les piden algunos institutos.

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