Transporte ferroviario

Soro garantiza el primer tren de la mañana de Zaragoza a Binéfar, pero ya no llegará a Lérida

Seguirá pagando a partir del día 28 el tramo aragonés y dejará de sufragar el Teruel-Caudiel al exceder de Aragón. El Ministerio pactó prestar estos servicios en bus, pero aún debe crear la plataforma de reserva y pago. 

Los consejeros de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, y de Hacienda, Carlos Pérez Anadón, en las Cortes, antes de comparecer este jueves.
Los consejeros de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, y de Hacienda, Carlos Pérez Anadón, en las Cortes, antes de comparecer este jueves.
Toni Galán

 El Gobierno de Aragón se negó a principios de año a seguir siendo la única autonomía que sufraga servicios ferroviarios que exceden su territorio y finalmente cumplirá su palabra a partir del 28 de noviembre. Eso sí, el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, ha ampliado su compromiso inicial y seguirá sufragando a partir de esa fecha el primer regional de la mañana de Zaragoza a Binéfar y su vuelta por la tarde, pero el tren no llegará como ahora hasta Lérida. El otro trayecto que venía financiando la DGA más allá de su territorio, Teruel-Caudiel y que se extendía hasta Valencia, ya no se recuperará, al igual que el Huesca-Jaca de los fines de semana, suspendido igualmente por la pandemia.

Este es el acuerdo final alcanzado por el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, con el Ministerio de Transportes, por el que Aragón seguirá sufragando dos servicios diarios por sentido Caspe-Fayón y el citado Zaragoza-Binéfar. Traducido a euros, 2,6 de los 4 millones anuales que venía pagando el cuatripartito y que tantas críticas ha provocado.

En una comparecencia ante el pleno de las Cortes, solicitada por el PP, Soro ha recordado que el exministro de Transportes José Luis Ábalos se comprometió el pasado verano a asumir estos servicios entre autonomías, aunque sustituyendo los trenes por autobuses. Pero lo que es una incógnita a 24 días de que expire el último plazo dado por la DGA para sufragarlos es si estará lista la plataforma digital para reservar y pagar los autocares o microbuses. Esta modalidad alternativa "a la carta, a demanda y completamente digitalizada" debería cubrir el trayecto diario de ida y vuelta Binéfar-Lérida y el Teruel-Caudiel para empalmar en días alternos con un tren hasta Valencia.

El único partido que ha mantenido las críticas a la gestión de la DGA ha sido el PP, cuyo diputado Joaquín Juste ha insistido en que el acuerdo con Transportes solo lleva al "desmantelamiento de los servicios ferroviarios". Por ello, lo ha calificado de «tomadura de pelo" y ha recordado que ha unido en su rechazo a 40 localidades y a las comarcas afectadas, además de a los empresarios.

Juste ha lamentado que se ponga en tela de juicio la cobertura ferroviaria por parte de unos gobierno que dicen ser "verdes" y preocupados por la vertebración del medio rural. Por ello, ha urgido a mejorar las frecuencias y los horarios, así como a poner trenes más competitivos. "Dejen de marear la perdiz y de pasarse la pelota de un Gobierno a otro", ha exigido. 

El consejero de Vertebración ha lamentado los "bulos y falsedades" sobre esta cuestión, dado que los servicios afectados solo representan el 5% del total de los servicios regionales, 20 de los 364 trenes de Media Distancia que circulan cada semana por Aragón. "No se va a desmantelar el ferrocarril, es falso", ha apostillado.

Soro ha informado de que Renfe ha recuperado el 80% de los trenes regionales que discurren por la Comunidad y le ha instado una vez más a reponer el resto, como ya hizo cuando expiró el primer estado de alarma en junio de 2020.

El consejero ha responsabilizado de la situación creada al Gobierno de Luisa Fernanda Rudi, que en 2014 firmó un "gravoso convenio" con Renfe por el que asumió la financiación de trenes que discurren fuera de la Comunidad, lo que tildó de "discriminación inadmisible".

De la misma forma, ha criticado que cuando llegó al Pignatelli en 2015 heredó del PP una deuda de 6,6 millones por el convenio antes de lograr que en 2018 se asumiera en el Ministerio que parte de los servicios, los de la línea de Calatayud y los Zaragoza-Teruel, debían correr a su cargo y no financiarlos Aragón. "Era un cuestión de justicia y se consiguió gracias a que me planté", ha afirmado antes de incidir en que ni él ni su equipo estaban dispuestos a seguir siendo, como censuraban a su predecesor, unos "pagafantas".

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