política

Los críticos del PAR ultiman su lista al congreso tras dar por hecha una mayoría de apoyos

Arturo Aliaga señala que su candidatura ofrece "unidad" frente a sus oponentes, que plantean "ruptura".

El vicepresidente Arturo Aliaga, a la derecha, con el delegado territorial, Benito Ros, y el vicepresidente de la DPT, Alberto Izquierdo.
El vicepresidente Arturo Aliaga, a la derecha, con el delegado territorial, Benito Ros, y el vicepresidente de la DPT, Alberto Izquierdo.
Heraldo.es

El sector crítico del PAR última las gestiones para presentar una lista de renovación con la que disputarle el liderazgo del partido a su actual presidente y vicepresidente aragonés, Arturo Aliaga. Las distintas corrientes que optan por el cambio se muestran muy optimistas tras haber hecho recuento de los compromisarios con lo que, a priori, cuentan para acudir al congreso convocados los próximos días 23 y 24. "Solo contando con los delegados muy críticos con Aliaga disponemos de algo más de la mitad de los delegados", añaden.

Tanto los oficialistas como los críticos llevan dos días arrogándose la mayoría entre los 500 delegados que acudirán al cónclave. Los segundos sí detallan sus números para concluir que tienen el 80% de los votos en la provincia de Zaragoza, donde hay 170 compromisarios, y el 55% en Huesca, donde se han elegido a 128. Ellos mismos reconocen que pinchan en Teruel, con un tercio de compromisarios, y que achacan a la afiliación en bloque de casi 300 militantes, recurrida ante los tribunales.

Por su parte, los oficialistas también dan por hecho que han ganado en Teruel –con un 78% al imponerse en la provincia y perder en Alcañiz y en la capital– y en Huesca, aunque admiten que en Zaragoza han rascado muy pocos delegados, tanto en la ciudad como en el territorio.

Mientras tanto, Arturo Aliaga ha afirmado este miércoles que su candidatura a la reelección ofrece "unidad", frente a sus oponentes, que plantean "ruptura". Aliaga, de visita en Teruel, defendió su modelo para aportar "gobernabilidad y estabilidad" a las instituciones. También ha censurado que los críticos "judicialicen" la vida del partido, una actitud que "crea mala imagen" y desagrada al electorado.

El líder aragonesista ha defendido su candidatura porque, a su juicio, aporta "seriedad, trabajo y currículum, con una forma de hacer las cosas a través de pactos". Ha añadido que, aunque ha intentado consensuar una lista única con los críticos, ha sido imposible porque una de las condiciones que estos plantean es la exclusión del propio Aliaga. Los críticos han replicado que no se puede pactar cuando lo que defienden desde hace meses en la necesidad de una renovación.

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