La 50ª edición del Día del Traje Ansotano, con formato diferente pero el mismo sabor

A diferencia de otros años, y debido a las restricciones sanitarias, no ha habido actos institucionales, ni se ha realizado la tradicional pasarela que se instalaba en la plaza Domingo Miral.

La villa de Ansó ha celebrado este domingo su día grande, con una gran ambiente en las calles, pero seguro en todo momento y sin aglomeraciones. Y es que en la celebración del 50 aniversario del Día de Traje Ansotano, se ha modificado el formato, de manera que se ha realizado todo al aire libre y se han suprimido aquellos actos que suelen congregar a mucho público en un mismo lugar. Por ello, no ha habidos actos institucionales ni la tradicional pasarela donde se mostraban los trajes.

Para adaptar esta jornada a las circunstancias actuales, se han creado siete espacios diferentes en las calles de la villa, donde los vecinos de Ansó han mostrado las tradiciones ancestrales de esta localidad, los oficios y los trajes que se vestían antaño. “En cada rincón había algo bonito que ver y que llamaba la atención”, ha explicado la alcaldesa ansotana Montse Castán. Además el público ha podido interactuar con los vecinos, pudiendo preguntar “y estar más cerca de los trajes”.

"En cada rincón había algo bonito que ver y que llamaba la atención"

Lo más destacado de esta edición “diferente” del Día del Traje Ansotano ha sido la implicación de los vecinos, que han sacado sus trajes, además de elementos para decorar cada rincón de la villa “y prendas antiguas que tenían en sus casas, más allá de lo que hay en el ropero”, tal y como ha destacado la alcaldesa. Esto “puede ser el inicio de algo muy interesante”, añadía, ya que se trata de elementos que los ansotanos tienen en sus casas. En los ‘escenarios’ creados en las calles para la ocasión se han escenificado diferentes momentos de la vida de los ansotanos, ataviados con diferentes trajes.

Los rincones han estado ambientados con música, lo que ha hecho que el paseo por los diferentes puntos de interés resultara más ameno. A los siete espacios creados para la ocasión se sumaba la exposición que se ha podido visitar en la torre medieval. Una vez finalizada la jornada festiva “todo el mundo se ha mostrado muy contento y satisfecho, porque se sentía fluir la gente con mucha seguridad, se han podido mover sin problema y han podido llegar a todo”, reconocía Montse Castán. Para poder conocer todo lo que ofrecía este domingo la villa ansotana, los visitantes se han guiado con un plano que se ha creado para esta jornada.

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