Las prisiones de Daroca y Zuera suspenden los vis a vis y los permisos por la pandemia
El incremento del 65% de contagios de la ultima semana en la provincia de Zaragoza provoca esta medida en los centros penitenciarios
Las prisiones de Daroca y Zuera suspendieron ayer los vis a vis y permisos para los internos por el efecto del aumento de la pandemia en la provincia de Zaragoza, según confirmaron fuentes de Instituciones Penitenciarias.
Alguna familia que procedía desde Murcia para visitar a un preso y los permisos concedidos a varios internos de Zuera, que trabajan en el centro penitenciario, fueron las únicas excepciones que se concedieron a última hora.
La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias remitió una carta a los centros con el incremento de contagios registrado en la última semana de un 65% en Zaragoza (desde 449 en la misma semana de 2020 y 743 la en 2021) y eso les llevó a la suspensión.
La prisión de Zuera solo había recuperado el vis a vis y los permisos el pasado 1 de julio desde declararse el estado de alarma en marzo de 2020. Y la de Daroca solo lo aplicó el último fin de semana, según fuentes penitenciarais. De hecho, esta medida se adoptó en comunicación con el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón y se ha ido adoptando de manera paulatina, ya que solo entraban dos familiares a ver al preso, donde antes podían acceder cuatro.
Los más de 1.000 internos de la prisión de Zuera llevan 15 meses comunicándose con sus familiares por videoconferencia para evitar los contagios en el centro penitenciario. De hecho, algunos de los internos de origen extranjero han agradecido que se pusiera en marcha este sistema para recuperar los contactos con los suyos.
Si hasta ahora esta comunicación se realizaba por el móvil, las prisiones han facilitado unas cabinas para realizan estas videollamadas y una tarjeta que pueden abonar los familiares.
Fuentes penitenciarias recordaron el sistema del vis a vis estuvo abierto durante apenas cuatro días en junio del 2020 y las dos semanas y media de julio. No obstante, el fuerte repunte de contagios que se produjo en ese momento por entre los temporeros de Aragón obligó a la DGA a prohibirlos de nuevo y en esta ocasión, la sexta oleada ha provocado la misma reacción.
Vacunados desde mayo
Asimismo, un equipo de la DGA y de funcionarios de la prisión vacunaron el pasado mes de mayo a los más de 1.000 presos de la cárcel, la mayor de Aragón y una de las más importantes de España. Esta medida ha facilitado que solo se detectara un contagio de dos mujeres presas que pasaron a estar apartadas en un módulo para evitar que el brote crediera y pasaron una cuarentena. La buena organización de los sanitarios de la prisión agilizó el proceso de inmunización a los internos, que se mostraron receptivos, aunque 70 de ellos se negaron a que los vacunaran.
Cuando ahora llega un interno a la prisión de Zuera y no está vacunado debe pasar una cuarentena. De este modo se evita que no haya contagios cuando inicie la convivencia con el resto de los internos o participe en un vis a vis, según fuentes penitenciarias.
