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Así se hizo la 'conquista' de la Luna en Jaulín que ha enamorado a Roberto Brasero
El espacio meteorológico de Antena 3 eligió unas imágenes del fotógrafo astronómico zaragozano Oswaldo Felipe grabadas el pasado día 29 de septiembre, en modo remoto, desde su casa de Muel.
Oswaldo Felipe es miembro de la PAI, la compañía de teatro que lleva años divirtiendo con imaginación e inteligencia a los niños de Aragón y de media España. Una de sus obras, 'Un salto de gigante', puso a Oswaldo sobre la pista de la astronomía, una ciencia de la que ya no se ha despegado. Se ha convertido en un más que apañado fotógrafo astronómico y ha puesto en marcha una iniciativa, Garbeo Cósmico, en la que acerca, con humor y rigor, a todos los públicos los secretos de esta ciencia.
Con ese mismo espíritu, a medio camino entre el juego y el experimento científico, Oswaldo lleva meses tratando de 'conquistar' la luna desde Muel, donde vive. ¿Cómo? 'Cazándola' con dos telescopios, una cámara, un teléfono móvil... y unos cuantos amigos.
Después de varios intentos, los pasados días 29 y 30 de septiembre lo logró en dos veces consecutivas. Oswaldo, primero con su pareja y luego, con dos amigos más, lograron grabar unas espectaculares imágenes, en las que aparecen esgrimiendo unas banderas, con sus siluetas recortadas sobre una enorme y espectacular luna llena. Las imágenes han llegado hasta el espacio meteorológico del popular Roberto Brasero en Antena 3, que las eligió para cerrarlo.
Lograr ese efecto óptico tan bello no ha sido tarea fácil. Oswaldo ha tenido que montar un 'set' de rodaje en un dormitorio de su casa, en Muel, compuesto por dos telescopios, una cámara réflex y un ordenador. Pero lo fundamental y más complicado fue calcular de manera exacta el punto de salida de la luna, en este caso, en el entorno de las Planas de Jaulín. Un punto geográfico que Oswaldo tiene en el campo visual desde la ventana de su casa. Hacía falta, además, que el cielo estuviera despejado.
Mediante cálculos especializados, el actor-astrónomo dio con la zona exacta a la que debía apuntar la cámara. Es decir, con el azimut, las coordenadas de salida de la luna y la altitud ( dirección horizontal y ángulo de altitud).
Con este dato clave, al que se le dedican horas, Oswaldo dispuso el 'set' fotográfico, que luego controlaría de manera remota con su móvil.
Con el telescopio y la cámara ya apuntando al punto calculado, comenzaba el momento más emocionante de la misión: ir en busca de la luna y saber si los cálculos eran correctos.
Así, los días 29 y 30 de septiembre, el primero con su pareja y el segundo con otros dos amigos, Oswaldo emprendió una excursión a unos 3 kilómetros de su casa, hasta las Planas de Jaulín. En concreto, al punto exacto calculado que, a la salida de la Luna, les permitiría encuadrarse dentro de ella y grabar esas espectaculares imágenes. Una vez fuera de casa, la suerte estaba echada, ya que era imposible corregir el emplazamiento del 'set' de grabación.
El móvil sirvió de brújula y, también, para controlar, una vez en el punto calculado, si efectivamente, era correcto.
"Lo más importante del vídeo es la planificación", dice Oswaldo, que tiene una cita con los aragoneses interesados en estos temas muy pronto, los viernes 16 y 23 de octubre y 13 y 20 de noviembre, con un curso de astrofotografía en el Planetario de Huesca.
