El 'Rambo de Requena' se niega a declarar hoy en la prisión de Zuera

El conocido como el 'Rambo de Requena', Pedro Lozano, que está en prisión provisional por un doble intento de homicidio a dos guardias civiles en Muniesa el pasado día 12, no ha querido declarar esta tarde ante la comisión judicial que se ha personado en la enfermerñia de la prisión de Zuera, donde fue trasladado el pasado martes de la cárcel de Teruel después de salir del hospital Miguel Servet.

"No, no quiero", ha respondido Pedro Lozano al juez instructor de Calomocha, Jorge Langarica, en una oficina sitiada en la enférmería, donde ha sido trasladado por varios funcionarios desde la camilla, en la que se recupera del disparo que recibió en una pierna tras agredir a dos guardia civiles. El magistrado iba acompañado por el secretario judicial, la fiscal, la acusación y la defensa.

"Aquí se está mal", ha manifestado el Rambo de Requena esta tarde, en un momento que ha mostrado una actitud de "asocial" en su negativa a prestar declaración. En realidad era la tercera vez que le han ofrecido las jueces de los Juzgados de instrucción de 1 y 2 de Alcañiz, y ha contestado lo mismo.

Hace una semana, no pudo prestar declaración en Zuera porque se encontraba en la camilla de la enfermería y no pudo ser trasladado a una sala de videoconferencia. En los siete días trascurridos, los responsables de la prisión optaron que la mejor alternativa era que se trasladara la comisión judicial al centro penitenciario.

Aunque sigue los pasos de Norbert Feher, Igor el Ruso, los funcionarios que lo trasladaron de la camilla a la oficina donde se han reunido con la comisión judicial han adoptado menos medidas de seguiridad que tenían que utilizar cuando sacaban al preso de origen serbio, cuando lo sacaban de la celda del módulo de aislamiento al patio o al gimnasio

Asimismo, el abogado de la acusación, Jorge Piedrafita, abogado del guardia civil herido y su compañero, ha solicitado en la vista celebrada en la prisión de Zuera la confirmación de la prisión provisional para el Rambo de Requena con una extensa argumentación sobre la peligro para el procedimiento, la ejecución del fallo y la ciudadanía en general. La Fiscalía también ha insistido en la situación de prisión y el abogado del preso ha pedido su libertad.

El letrado de la acusación considera que una vez se emita el auto por el juez instructor y sea firme la situación personal de Pedro Lozano, se podrá seguir trabajando en las diligencias que se practicarán en el juzgado de Calamocha con los testigos al efecto de acreditare que el implicado "trató de asesinar a los dos agentes de la Guardia Civil, que salvaron la vida gracias a su pericia profesional y consiguieron que el acusado huyera del lugar de los hechos". Por eso, ha anunciado que tratará de lograr la pena máxima para salvaguardar los derechos de los agentes de la guardia civil afectados.

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