Aragón supera ya los 560 centenarios, que gozan de mejor salud que los de 80 años

El número de personas centenarias en Aragón se ha cuadruplicado en poco más de dos décadas, una progresión que se mantendrá de manera exponencial y que hace necesario adaptar el sistema sanitario y social a esta tendencia demográfica. Ya son más de 560 las personas en la Comunidad que pueden presumir de tener una edad de tres dígitos. Un estudio aragonés revela que este colectivo goza en general de mejor salud que los octogenarios y los nonagenarios porque, según ha demostrado un equipo de investigación multidisciplinar de profesionales clínicos y de salud pública, no tienen tantas enfermedades, toman menos medicamentos y no requieren de tantos ingresos hospitalarios.

Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística evidencian que hay 568 personas con al menos 100 años en Aragón: 366 en Zaragoza, 118 en Huesca y 84 en Teruel. En 1998 eran 129 entre las tres provincias. La esperanza de vida en la región alcanza ya los 83,45 años (en las mujeres sobrepasa ligeramente los 86 años mientras que en los hombres se aproxima a los 81). Las previsiones apuntan a que en los próximos 25 años el número de centenarios a nivel nacional (16.303) seguirá creciendo exponencialmente.

Un equipo de profesionales del grupo de investigación EpiChron del Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud (IACS) y el Instituto de Investigación Sanitaria (IIS) de Aragón lleva desde 2017 estudiando la salud de los centenarios gracias a los datos proporcionados por las historias clínicas, consumo de fármacos y número de asistencias sanitarias de 1.680 ancianos aragoneses de esta franja de edad entre 2011 y 2015. Las conclusiones, publicadas en la revista ‘BMC Geriatrics’, revelan que se trata de una población que tiene bastante multimorbilidad (presencia de dos o más enfermedades crónicas) y una elevada polifarmacia (consumo al mismo tiempo de cinco o más fármacos).

"Es más la regla que la excepción", pero el estudio arrojó datos interesantes, explica Mercedes Clerencia-Sierra, geriatra del Hospital Miguel Servet de Zaragoza e integrante del grupo EpiChron: "Se observó que era menor el porcentaje de consumo de medicamentos entre aquellos que tienen 100 años o más y, en cuanto al uso de servicios sanitarios, los centenarios suelen acudir a atención primaria, más que especializada, tienen pocos ingresos hospitalarios y atenciones en urgencias".

Estos datos confirman que "son un colectivo con menos carga de enfermedad, las patologías más frecuentes no comprometen la vida y, por lo tanto, consumen menos fármacos y acuden menos a los servicios sanitarios". Así, "la diabetes mellitus, que es la tercera patología más frecuente en los octogenarios, desaparece de los diez primeros puestos en los centenarios", afirma Clerencia-Sierra.

¿Y cuál es el secreto para llegar a centenario? "Son de una pasta especial", resume Paloma González García, geriatra y presidente de la Sociedad Aragonesa de Geriatría y Gerontología (SAGG). "Tienen un fenotipo muy saludable. A nivel genético son gente con una salud excepcionalmente buena, aunque hayan pasado épocas malas: han vivido una guerra, años de escasez... Parece que tienen una edad biológica menor que la cronológica", asegura. A eso se une el estilo de vida: seguir una dieta mediterránea, ejercicio moderado e interacción social. "Hemos visto –subraya– que hay centenarios en pueblos y en ciudades, pero todos tienen un patrón de comportamiento similar: son personas con hábitos sistémicos sanos".

El número de centenarios está aumentando y "hay que tenerlo en cuenta para saber qué características están haciendo que lleguen a esa edad y adecuar el sistema sanitario a modelos de atención con una visión geriátrica integral y adaptados a sus características y verdaderas necesidades", indica Mercedes Clerencia-Sierra. Un aspecto en el que coincide González García: "Estamos intentando favorecer medidas de higiene y hábitos de vida saludable, control de factores de riesgo cardiovascular, ejercicio, dieta...".