Según los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud, se calcula que un 23% de la carga mundial de mortalidad son atribuibles a factores medioambientales. Esto, según Pilar Aparicio, directora general de Salud Pública, Calidad e Innovación del Ministerio de Sanidad, tiene varias causas: "El aire que respiramos, la contaminación de la atmósfera, las temperaturas extremas, los vectores que llegan a nuestro país como mosquitos y transmiten enfermedades que no teníamos". Todas estos elementos tienen "efectos en la salud", que van desde enfermedades crónicas a dolencias cardiovasculares.

"Todos pensamos en agua sana, limpia, potable y el aire tiene que ser lo mismo", ha señalado Aparicio. "Por ejemplo, el aire contaminado tiene otros efectos en la salud que estamos detectando como partos prematuros, efectos en el desarrollo neurológico", ha añadido.

En este mismo sentido, Francisco Javier Falo, director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, ha precisado que las temperaturas extremas, como el calor, aumentan un 50% la sobremortalidad, en especial en "personas vulnerables". Además, ha puesto un ejemplo con el caso de los mosquitos. "Ahora mismo los ciclos de calor duran más y aumenta los ciclos reproductivos. Por lo que antes era una presencia de mosquitos desde junio a septiembre, puede provocar que un día de noviembre salgas a la calle y te encuentres mosquitos". Por todas estas razones, "trabajar en la calidad del medioambiente es trabajar en salud".

Ambos han intervenido en las jornadas 'Adaptándonos al cambio climático' que organiza el Instituto Aragonés de Ciencias de la Salud y que se ha celebrado en el salón de actos de CIBA. Sandra García, directora del IACS, ha señalado que los ponentes son "profesionales sanitarios" y que además de estas charlas es "un foro permanente" y una "forma continuada de trabajar".

Por último, Aparicio, ha querido resaltar el "momento histórico" que supone la Cumbre del Clima que se va a celebrar en Madrid del 2 al 13 de diciembre. Asimismo, ha revelado que están trabajando en el desarrollo de un plan nacional "muy ambicioso" que recoja todos los aspectos del cambio climático. Así, esperan alcanzar "un buen plan para mejorar la salud de toda la población". En el acuerdo están colaborando investigadores, la sociedad civil y las Comunidades Autónomas y ha precisado que ya hay un borrador: "Con esta lucha contra el cambio climático nos beneficiamos todos". 

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