Los funcionarios del Gobierno de Aragón que no perciben un complemento específico B se beneficiarán de una reducción de la jornada laboral de media hora semanal, al pasar de 37,5 a 37 horas. La DGA les devolverá el exceso acumulado en los seis primeros meses del año, que está cuantificado en diez u once horas. Es una primera concesión a los sindicatos, que insisten en avanzar hacia la jornada de 35 horas semanales y en que se comience a aplicar una reducción de jornada para los mayores de 55 años sin rebajar sus salarios.

Las secciones sindicales de UGT y CC. OO. acordaron con el Ejecutivo PSOE-CHA en noviembre de 2018 que se rebajaría la jornada laboral en media hora si la Comunidad cumplía los objetivos de estabilidad, una opción que se cumplió y que supuso revertir el aumento que la DGA aplicó en 2012.

La orden de Hacienda que hace efectiva esta medida se publicó a inicios de este mes en el Boletín Oficial de Aragón. Quedan fuera del acuerdo el personal que desempeña puestos de trabajo con complemento específico B (destinado a retribuir la mayor dedicación horaria) y, en los laborales, los de especial ocupación, que deberán prestar una jornada laboral de 39 horas y media, ajustándose a los cuadros predeterminados.

Es difícil precisar cuántos funcionarios se beneficiarán de esta medida, que a partir de ahora va a suponer una reducción de seis minutos en la jornada diaria y en los centros de trabajo con jornada ponderada representará tres días más a lo largo del año. Aproximadamente el 40% de la plantilla de la DGA en Administración General tiene el complemento A, y el 85% del personal laboral, y 25% del personal funcionario, según explicaron desde Comisiones Obreras.

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El exceso horario que se ha generado desde el pasado mes de enero ronda las diez u once horas, y también ha de ser compensado. En principio, se acumulará en una bolsa de horas de la que se beneficiará el personal con complemento específico A. Para el personal que no tiene flexibilidad horaria, existirá la posibilidad de acumularlo en jornadas completas y fraccionadas. Tanto UGT como CC. OO. urgen a Función Pública a que diseñe un criterio preciso y rápido para regular la compensación y a que emita una instrucción que clarifique a todos los departamentos cómo se llevará a cabo.

Este es un primer paso para alcanzar la jornada de 35 horas semanales, una de las principales reivindicaciones sindicales. CSIF no firmó el acuerdo en la Mesa de Negociación porque la reducción a 37 horas semanales le parecía insuficiente y no estaba de acuerdo en vincularlo al cumplimiento de los objetivos de estabilidad.

Tanto CSIF como CC. OO. solicitan a la DGA que avance, de forma urgente, en la reducción de la jornada para mayores de 55 y 60 años sin que suponga una merma retributiva. También piden avances en la apertura de la negociación de la carrera profesional y que se retomen las aportaciones al plan de pensiones.

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