El Estado financiará Aragón con 3.675 millones, un 4,1% más, pero por debajo del 6,4% nacional

El proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2019 asigna a Aragón una financiación de 3.675 millones de euros, 147 millones en recursos provisionales más que los 3.528 millones que percibió en 2018. El aumento, del 4,1%, queda por debajo del 6,4% de la subida media en las autonomías de régimen general, con un importe total que pasa de  103.817 millones a 110.448. Resulta, además, el menor incremento de todo el país, con autonomías como Cataluña que crecen un 8,1% (de 19.169 a 20.729 millones) o Canarias, un 8,4% (de 4.876 a 5.286). El peso relativo de Aragón en la tarta de la financiación autonómica nacional se reduce al 3,3%.

De nada ha servido el frente común que formaron hacer once meses Aragón, Asturias, Castilla y León y Galicia para exigir que la financiación tuviera en cuenta el coste real de la prestación de los servicios. Ni el popular Mariano Rajoy atendió su petición, ni su sucesor en la Moncloa, Pedro Sánchez, tiene la más mínima intención de hacerlo. Nada cambia a pesar de que en septiembre se sumaron al grupo Castilla-La Mancha y La Rioja, y ahora concentran el 52% de la superficie del país, aunque solo al 21% de los españoles.

Los recursos transferidos por el Estado a Aragón llegaron a alcanzar los 3.504 millones en 2009. Desde entonces, comenzaron a bajar, y se estancaron en torno a los 2.900 millones hasta 2015. La asignación volvió a superar los 3.136 millones en 2016 y, desde entonces, ha registrado aumentos del  6,1% en 2017 (3.329 millones) y del 5,9% en 2018 (3.528).

Las cifras que figuran en el proyecto de presupuestos del Gobierno de Sánchez son provisionales, y se van a ajustando a lo largo del año, según confirmaron desde la consejería de Hacienda de la DGA. Defienden, no obstante, la importancia de que los PGE salgan adelante pues de ello depende que Aragón reciba unos 200 millones más.

Con el proyecto actual, Aragón, Cantabria, Extremadura, Asturias, Galicia y Castilla y León, la ‘España vacía’, son, junto a Baleares, las que un menor incremento de recursos experimentan. Y es Aragón, la más combativa al pedir la reforma de la financiación, la que sale peor parada. El propio presidente de la DGA, Javier Lambán, recordó recientemente en un acto de apoyo a la escuela rural en Calamocha (Teruel) la importancia de negociar un nuevo modelo."Que exista una financiación autonómica basada exclusivamente en el número de habitantes significa que comunidades como la nuestra tienen dificultades, a veces insuperables, para proveer de servicios públicos de calidad al medio rural", dijo.

Pero parece que los criterios que el Gobierno ha seguido al elaborar el proyecto de PGE están más dirigidos a captar apoyos para sacar las cuentas adelante, con Canarias, Cataluña, Andalucía y Madrid como las autonomías más favorecidas, que a atender a las regiones despobladas.

Como decía Lambán, la reforma del sistema de financiación autonómica"ni está ni se la espera". Con 84 diputados y elecciones a la vista, no es previsible que Sánchez se atreva a abrir la caja de los truenos con un debate entre la ‘España vacía’ y la que no lo está que pocas alegrías le puede deparar.