Los aragoneses gastan 14 veces más en restaurantes que en cines y teatros
Aún así, Aragón es la segunda Comunidad con mayor gasto por habitante en servicios culturales.
Cada aragonés pagó de media, a lo largo de todo el año pasado, algo menos de 78 euros por asistir a cines, teatros, espectáculos, museos o bibliotecas. Dato que contrasta con los 1.058 euros que desembolsó de media cada vecino de la Comunidad por comer y beber fuera de casa y que queda recogido en la 'Encuesta de Presupuestos Familiares' que publicó este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Según estos datos, cada aragonés gastó una media de 11.580 euros a lo largo de todo el año pasado. Como es lógico, la mayor parte de este montante (el 30,34%) fue a parar a cubrir los gastos de vivienda, agua, gas y electricidad; mientras que un 15,22% se invirtió en la compra de alimentos y bebidas no alcohólicas.
Aunque la encuesta refleja que un 6,3% del gasto medio anual de cada aragonés se invirtió en ocio y cultura, ese epígrafe es muy amplio e incluye tanto la compra de aparatos electrónicos y juguetes, como los juegos de azar e incluso la adquisición de mascotas y de productos de jardinería. En realidad, apenas un 0,67% del presupuesto medio anual de cada aragonés fue a parar a las taquillas de los distintos servicios culturales que ofrece la Comunidad frente al 9,14% que se quedó en las cajas registradoras de bares y restaurantes.
Un 13,4% más en ocio
Aún así, la encuesta publicada este martes refleja cierto incremento del gasto en todo lo relacionado con el ocio y la cultura. El año pasado los aragoneses gastaron un 13,4% más que el anterior en servicios recreativos, deportivos y culturales (hasta los 268 euros por cabeza) y, de hecho, son los segundos que más gastan del país tanto en la asistencia y participación en eventos recreativos y deportivos (109 euros por cabeza al año) como en cines, teatros, espectáculos, museos y bibliotecas (cerca de los 78 euros al año frente a los 55,7 de media nacional).
Pese a ello, la cifra sigue resultando chocante frente al desembolso realizado en restauración. A lo largo del año, el conjunto de los aragoneses gastó más de 1,37 millones de euros en comer y beber fuera de casa frente a los 100.400 euros que desembolsó por servicios culturales y a los 141.700 que invirtió en otro tipo de servicios recreativos y deportivos.