En los últimos años es recurrente la afirmación de que hay comunidades en las que las pruebas de acceso a la universidad son más fáciles que en otras. De hecho, tras la realización del examen de Química del año pasado hubo varias quejas por parte de alumnos y padres que aseguraban que los estudiantes de otras universidades (“con exámenes más fáciles”) podrían acceder a las titulaciones que se ofertaban en Aragón, en lugar de los que habían realizado el "complicado" examen de Química. La mayoría de ellos señalaban hacia Andalucía como una de las comunidades con pruebas más fáciles, sin embargo, un análisis realizado sobre el porcentaje de alumnos que obtienen un sobresaliente en los exámenes de selectividad no corrobora esa visión.

Según los datos publicados por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte respecto a las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) de 2016, Extremadura es la comunidad con mayor porcentaje de sobresalientes: un 20,19% (si se tienen en cuenta la media entre todas las materias que se examinan en la fase general y la específica). Aragón es la segunda comunidad que más porcentaje de sobresalientes tiene: 19,36%. En la comunidad aragonesa destaca el volumen de alumnos con una nota entre el 9 y el 10 en Griego (40,86%), Historia de la Filosofía (25,57%) y Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales (24,71%).

También superando el umbral del 20% y con un volumen de alumnos considerable se encuentran Geografía (20,50%), Economía de la Empresa (20,37%) y Física (20,10%). En el lado opuesto destacan asignaturas como Francés (6,04%), Dibujo Artístico (6,33%), Tecnología Industrial, (6,41%), Lengua Castellana y Literatura (7,45%) y Química (9,3%). “El alumnado de Aragón está muy bien preparado y obtienen en la selectividad unas calificaciones muy similares a las medias de Bachillerato, y además se quedan con la mayoría de las plazas que se ofertan en la Universidad de Zaragoza. Por eso, el mito de que vienen de otras comunidades y dejan sin plazas a los aragoneses no es real”, puntualiza Fernando Zulaica, delegado del Rector de la Universidad de Zaragoza para las pruebas de acceso y admisión a la universidad.

Un ejemplo es que de las 181 plazas de Medicina que se ofertaron el año pasado, 150 están ocupadas por estudiantes de Aragón. “Por su parte, 11 son de La Rioja y 9 de Navarra, dos comunidades que pertenecen al Campus Iberus (del que forma parte Zaragoza) y en las que no hay facultades públicas de Medicina”, explica. De este modo, se pone en evidencia que los estudiantes aragoneses no están en desventaja con respecto a otras comunidades.

Entre las comunidades con mayor porcentaje de sobresalientes también destacan Asturias, con un 19,3%, y Canarias, con un 18,93%. La comunidad con menor porcentaje de sobresalientes en la PAU es Navarra (10,01%). Posteriormente se encuentra País Vasco (10,52%), Galicia (11,20%) y Madrid (12,14%). Como se puede comprobar, las diferencias entre unas y otras son considerables: Extremadura tiene más del doble de población con una nota superior al 9 que Navarra.

Otros estudios, como el realizado por la catedrática de Bioestadística de la Facultad de Medicina de Valladolid, Cristina Rueda, corroboran esta visión. En su caso, solo ha analizado las notas de las asignaturas obligatorias (Lengua Castellana y Literatura, Inglés e Historia de España e Historia de la Filosofía) y las de las dos materias que más se eligen para hacer acceder a Medicina: Biología y Química. Para hacerlo ha contado con los datos publicados en la página web del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte correspondientes a la PAU de 2015.

A pesar de tomar solo las asignaturas más puntuales y de referirse a hace casi dos años, en este estudio Extremadura también es la comunidad donde se obtienen mejores resultados y en Navarra la que arroja peores registros. Por su parte, Aragón también se sitúa entre las comunidades con mayor volumen de alumnos con calificaciones superiores al 9.

Zulaica señala que estos datos pueden ir variando de un año a otro: “Hay años en los que puede haber una pregunta más complicada en una universidad o en otra, entonces hay mucha variación”. Asimismo puntualiza que estas notas solo suponen un 40% de la calificación de acceso, mientras que el 60% restante se obtiene con la media del Bachillerato. “Esta es la nota que tiene un gran impacto y se han detectado desviaciones típicas de décimas entre comunidades. Los alumnos se juegan el acceder a una carrera u otra por centésimas o milésimas”, recuerda.

¿Exámenes fáciles o hay alumnos mejor preparados?

Si se comparan estos datos con los que revela el informe PISA se pueden observar bastante diferencias. Una de las más llamativas es que, de manera generalizada, aquellas comunidades que tienen peores datos en PISA, obtienen mejor ratio de sobresalientes en la selectividad y al revés. Solo hay que observar que tres de las cuatros comunidades que se encuentran como las mejores en PISA están entre las que peor porcentaje de aprobados tienen: Madrid, Galicia y Navarra. Lo mismo ocurre si observamos la parte baja de la tabla. Casualmente o no, dos de las cuatro que ocupan esta posición (Extremadura y Canarias) lideran el volumen de sobresalientes en la selectividad de 2016.

Aragón es una de las pocas comunidades que en ambas cuestiones se encuentra en una posición parecida, en concreto, en la parte alta de la tabla. Mientras que en el informe PISA se sitúa como la quinta comunidad con mejores resultados (en este último estudio mejoró en todas las variantes), en el análisis realizado de los resultados de las pruebas de acceso a la Universidad tiene el segundo puesto en cuanto número de sobresalientes. “Esto demuestra que los alumnos aragoneses están bien preparados y que por eso obtienen buenos resultados en el Bachillerato y en la PAU, de hecho, no hay casi diferencias entre una nota y la otra”, subraya.

Examen único

Ante estas dudas sobre si los exámenes son más fáciles en unas comunidades u otras, hay colectivos que piden la realización de un examen único en todo el Estado, una opción que a Zulaica no le convence. “Ya se propuso con la Lomce, pero hacer un examen único, con los mismos criterios de corrección y que estuviera corregido en tres días de manera centralizada solo se podía hacer con preguntas tipo test. Con este método no se evalúan las competencias, la madurez y la capacidad de análisis del alumno por lo que no es la mejor opción”, explica.

Por ello apuesta por la actual propuesta del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte: marcar unos estándares de aprendizaje iguales en todas las comunidades. “Habría que darle alguna vuelta, especialmente, contando con los profesionales que imparten estas materias, pero se podría llegar a unos criterios homogéneos en todo el Estado", recalca. Una opinión que también han defendido los colectivos de estudiantes. Por ejemplo, desde Estudiantes en Defensa de la Universidad (EDU) ya se señaló que se debían realizar cambios, pero no era necesario hacer la misma prueba: “Con que haya un consenso entre los armonizadores de todas las comunidades y se ponga un tipo de examen similar es suficiente”.