El sector del porcino altoaragonés se siente maltratado por la Administración. No solo porque, según dicen los ganaderos, no atiende sus demandas, sino porque lo somete a una férrea disciplina normativa en cuanto a la regularización de explotaciones que contrasta con lo que ocurre en otras comunidades autónomas. Además, denuncian que no les apoyan económicamente, en ningún sentido, dejan caer las Agrupaciones de Defensa Sanitaria (ADS) y hacen caso omiso a sus repetidas llamadas a que se tomen medidas para que el valor añadido de este producto revierta en Aragón, mediante la captación de una plataforma cárnica potente en la provincia de Huesca que genere marca.

Este es el mantra que recitan los responsables de Asopeco –la unión de las ADS del Bajo Cinca, Benabarre y comarca, Estadilla y Fonz, Felidesa (La Litera), Graus y comarca, Monzón y comarca y Somontano Barbastro– a poco que se les dé oportunidad. Sus argumentos son que el sector porcino, solo en la provincia de Huesca, supone el 22% del PIB y que las cuatro empresas que más facturan en el Alto Aragón están todas ligadas a él. «En Aragón, quitando la General Motors, seguramente es el sector que más gente ocupa, unos 10.000 puestos de trabajo en toda la Comunidad. tanto directos como indirectos», comenta José Luis Fumanal, presidente de la ADS de Monzón.

Es por ello que no entienden que el Gobierno de Aragón les ponga tantas trabas a la hora de hacer rentables sus granjas, lo que implica tener 4.000 cerdos de engorde, como mínimo si se trata de autoempleo; o de 1.000 madres si es explotación industrial, lo que ya supone emplear a una decena de personas. Señalan que hay que desmentir mitos, como que «haya un crecimiento exponencial del porcino en Aragón, siendo que crece más en Cataluña. En un año, las granjas catalanas han generado 70.000 cerdas más y Aragón solo 4.000, en engorde, 477.000 plazas más, según el Ministerio de Agricultura, y en Aragón nos hemos quedado en 137.519 plazas más», dice José Luis Lavilla, presidente de Asopeco.

La otra queja proviene de lo que consideran «un despropósito», porque «de los 4 millones de cerdos que se producen en Huesca al año, solo se mata aquí un 20%. Eso es un valor añadido que se pierde en Aragón, por lo que por cada 100.000 € que se pierde en producto cárnico dejan de crearse tres o cuatro puestos de trabajo, y esto hasta ahora no se ha valorado», indica José Ramón Mazarico, presidente de Felidesa. Para él, la solución está en «estudiar la viabilidad de una plataforma cárnica de mataderos para exportar directamente desde aquí y no desde otras comunidades».

Asopeco dice que desde el pasado noviembre espera la respuesta del Gobierno de Aragón a varias propuestas para abordar estas reivindicaciones. Mientras, se emplean en mantener sus ADS a pesar de que les han cortado las subvenciones para ellas, las únicas que recibía el sector.

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