El Servicio Aragonés de Salud no consigue dar con la clave para reducir la lista de espera quirúrgica. De los 25.202 pacientes que aguardan una operación, 2.642 –tan solo cuatro personas menos que en agosto– lo hacen desde hace más de seis meses. La mitad de ellos, 1.301, precisan una intervención de Traumatología; 486, de Cirugía General, y 265, de Neurocirugía.

La lista de espera quirúrgica ha sido y sigue siendo uno de los principales quebraderos de cabeza del consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, que un año después de ocupar el cargo sigue sin conseguir las cifras que desearía. Lo que los números reflejan es que el mayor ‘atasco’ sigue estando en Trauma. Aunque es verdad que hay 93 personas menos esperando que en agosto, los problemas se siguen concentrando en algunos de los procesos más frecuentes y comunes, como las prótesis de cadera o rodilla, con una demora media de más de cuatro meses (120 días).

A pesar de estos resultados, Sanidad ha decidido por ahora reducir la colaboración que firmó el año pasado con el Hospital General de la Defensa para bajar la lista de espera de Traumatología. Ha optado por suspender las operaciones que el personal del Salud hacía en los quirófanos del Militar. Mantiene, sin embargo, la derivación de ocho pacientes al mes desde el Royo Villanova, pero con personal y medios del centro de Casablanca.

Subida en Oftalmología

Pero los problemas no solo se centralizan en Trauma. Los responsables sanitarios no ocultan su preocupación por la tendencia ascendente de la lista de Cirugía General y Digestivo, que en septiembre la conforman 486 personas (21 más que en agosto y 112 más que en julio) y la de Oftalmología. En esta última especialidad hay 107 aragoneses aguardando cuando en el mes de agosto había 36.

Es, precisamente, en uno de sus procesos más frecuentes, y que más había mejorado en el último año, donde las cifras más han empeorado. Si en julio ocho personas estaban pendientes de una intervención de cataratas, en septiembre ya son 75.

Ante la lista de espera publicada ayer, fuentes del Departamento de Sanidad destacaron que aunque son 2.642 las personas pendientes de una operación desde hace más de seis meses, son 388 menos que en septiembre de 2015 y 4.000 menos que en el mismo mes de 2014, cuando se alcanzaron las 6.654.

Las mismas fuentes consideraron positivo que la lista se mantenga prácticamente en las mismas cifras que en agosto, ya que recordaron que tradicionalmente aumenta en los meses de verano, debido a la disminución de la actividad quirúrgica durante las vacaciones.

Precisamente, algunos profesionales consultados por este periódico achacaron los malos resultados en alguna especialidad al cierre de quirófanos durante la época estival. Esto, según explicaron, frena el ritmo habitual de intervenciones que se sigue durante el resto del año.

De momento, Sanidad confía en que los grupos de trabajo creados, en los que participan diferentes profesionales, comiencen a dar sus frutos a finales de este año. Estos van encaminados a mejorar métodos de trabajo y unificar criterios de actuación entre las especialidades de los diferentes hospitales.