El grupo aragonés Ruberte ha adquirido un nuevo espacio donde seguir ampliando su producción: las antiguas Bodegas Caytusa, hoy renombradas como Bodegas Monasterio de Veruela, que fueron fundadas en 1986 y que están ubicadas en la localidad de Ainzón, en la provincia de Zaragoza, zona en que la Denominación de Origen Cava permite elaborar cava.

En la primera elaboración que se está llevando a cabo, se han realizado 70.000 botellas de cava Brut Nature y 1.000 botellas de cava rosado Brut Nature.

Las bodegas de Ainzón cuentan con una larga trayectoria y, además, un gran valor patrimonial, pues buena parte del espacio que ocupan consiste en cuevas subterráneas, en concreto cerca de 600 m2, donde el cava embotellado descansa para su envejecimiento en botella. Estas cuevas tienen una capacidad de almacenamiento de hasta 300.000 botellas.

Grupo Ruberte ha señalado en nota de prensa que, con esta compra, "demuestra que sigue apostando por lo tradicional en cuanto a las elaboraciones, así como por fomentar el patrimonio de la zona", pues expertos en la realización de visitas a sus bodegas de vino abrirán también en otoño las puertas de las nuevas Bodegas Monasterio de Veruela, "una auténtica maravilla arquitectónica con impresionantes cuevas donde se podrá además degustar cava de gran calidad".

Además del aumento en la cantidad de las elaboraciones y en instalaciones, Grupo Ruberte crece también en número de empleados, sobre todo en las épocas de mayor producción.

La enóloga Susana Ruberte, que cuenta con una larga trayectoria en la elaboración de cava, oficio que aprendió en su carrera profesional, ha afirmado que el Grupo podrá “por fin llevar a cabo uno de sus sueños de poder elaborar cava en su propia bodega”.