La seguridad que mostraron ante el Grupo de Blanqueo de Capitales los carpinteros de Ejea que hicieron trabajos por 23.948 euros en la casa de Fuendetodos de Alfredo Romero Santamaría se tornó en ignorancia y amnesia cuando tuvieron que declarar ante la juez del caso. Si en febrero de 2014 fueron rotundos al explicar a la Policía que la mujer de Romero les pidió un presupuesto en 2007 para colocar puertas, ventanas, miradores y balcones en su casa de Fuendetodos y que, una vez hechos los trabajos, el marido dijo cómo y de qué manera tenían que facturarlos, solo dos meses después dijeron no saber absolutamente nada de las cuentas de su empresa. Los dos socios de Carpintería Mena, Carlos M. C. y Miguel Ángel M. V., señalaron a la instructora que ellos se limitan a poner puertas y todas las gestiones económicas las lleva su hermano y primo, respectivamente, Fernando M. C., el cual aún no ha declarado en esta causa.

La Policía escuchó en calidad de testigos a Carlos M. C. y Miguel Ángel M. V., el 24 de febrero de 2014, y ambos señalaron que fue la esposa de Romero la que un día de principios de 2007 se presentó en su empresa de Ejea –en cuyo centro de salud trabajaba entonces la mujer– y les pidió un presupuesto para rehabilitar su casa. El que le hicieron les pareció bien y en las semanas siguientes hicieron los trabajos por un importe de 23.948 euros. Añadieron que cuando Alfredo Romero les fue a pagar, les dijo que le dieran el número de cuenta y que le hicieran dos facturas, una a nombre de Proyectos Culturales Europa S. L. y otra al de Videar S. A. y las dos por conceptos ajenos a la casa de Fuendetodos.

Ambos carpinteros dijeron que en ese momento no sabían si esas empresas eran o no de Romero, por lo que no pusieron reparos ni objeciones a facturarle de esa manera porque lo que ellos querían era cobrar. Después, ya como imputados, declararon ante la juez que cuando contaron eso a los agentes de Blanqueo de Capitales Fernando M. C. estaba en la uci y ellos se limitaron a coger una carpeta con las facturas de Romero y a llevárselas a la Policía. Dijeron que jamás han tenido relación con Videar o Poyectos Culturales Europa y que nunca han trabajado ni en el palacio de Sástago donde se hizo la exposición que figuraba en el concepto de la factura de esta última, ni para el Gobierno de Aragón. "Solo trabajamos en la casa de Fuendetodos", subrayó Carlos M.