Al menos una veintena de farmacias situadas en Aragón tienen colgado el cartel de 'se vende' en internet. Muchas se anuncian en los típicos portales web donde también aparecen coches, juguetes, mascotas o apartamentos en la playa. Varias, las menos, aparecen reflejadas en los portales de empresas especializadas que se dedican en exclusiva al traspaso de estos negocios. Llama la atención que muchas de las farmacias en venta estén situadas en zonas rurales, sobre todo de la provincia de Teruel. Se debe, según fuentes autorizadas del sector, a la encrucijada en la que viven desde hace algunos años estos negocios.

“Las farmacias viven hoy una situación mucho más dura que hace 15 años”, explica Ramón Jordán, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza. “Desde el año 2009, el 60% del ahorro del gasto sanitario se ha aplicado al ámbito farmacéutico”, apunta Jordán. “Antes era un sector con mucho movimiento, pero en la actualidad meterse en este negocio no resulta demasiado atractivo”, agrega.

Las farmacias españolas dependen totalmente de las compras de los asegurados. Según consta en el Informe Anual de Oficinas de Farmacia 2015, la farmacia media española tiene una facturación media anual en torno a los 500.000 euros. Más del 75,18% del total se corresponde con ventas de medicamentos a asegurados (Seguridad Social, Muface, etc.) y solo el 24,82% son ventas libres.

En Aragón esta dependencia es mayor. De acuerdo con los datos aportados por Ramón Jordán, en una farmacia urbana aragonesa las ventas a asegurados pueden suponer en torno al 80% de las ventas totales. En un despacho rural, ese porcentaje supera el 90%.

Son este segundo grupo de farmacias las que viven hoy una situación más delicada. A pesar de que la legislación contempla una protección especial para ellas, no suele ser suficiente para sacar el negocio adelante, por eso el número de establecimientos rurales en venta es importante.

Poca información

Más allá del tradicional y sencillo anuncio en la web de clasificados de turno, existen numerosas empresas especializadas exclusivamente en la compraventa de despachos de farmacia. Muchos tienen su espacio en la red, donde se anuncian brindando asesoramiento legal y administrativo durante todo el proceso de venta, para el que prometen pulcra confidencialidad y máxima garantía.

Y es que, en general, los procesos de compraventa activos son bastante opacos. En los anuncios no se suele ofrecer localización exacta de la farmacia: se suele dar como referencia la provincia y sólo unos pocos propietarios se animan a reducir un poco más el ámbito espacial. “Particular traspasa oficina de farmacia en municipio turístico de la provincia de Teruel, a una hora de la capital y a 90 minutos de Valencia y Castellón”, reza uno de los anuncios. Es uno de los más detallados. 

Un dato que sí que aparece en gran número de anuncios es la facturación de la oficina de farmacia. Tal y como explica Ramón Jordán, ofrecer la facturación anual de la farmacia sirve para que los interesados en adquirirla se hagan una idea de cuál es la actividad del despacho. Hay facturaciones muy dispares: desde 120.000 euros hasta superar el 1.000.000 de euros. “Esas cifras son ventas brutas: de ahí hay que restar precios de compra, las nóminas de los trabajadores, las facturas (luz, agua, alquiler del local si lo hay, etc.)”, explica Jordán, quien añade que sólo un 10% de todas las farmacias de la capital aragonesa llegarían a situarse en torno al millón de euros de facturación.

Según apuntan desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza, el traspaso de farmacias es libre, como cualquier otro tipo de negocio. Cuando se trata de una apertura, sin embargo, el sistema cambia y está más regulado. 

Otro modelo es posible

Los farmacéuticos creen que otro modelo es posible. “La farmacia vive del margen del precio de los medicamentos. Si se venden menos medicamentos y estos son más baratos, ese margen baja”, opina Ramón Jordán, que considera que el sistema farmacéutico actual tiene algunos puntos de mejora.

Para hacer frente a los nuevos retos, las autoridades han permitido en los últimos tiempos que las farmacias se abran a nuevos canales de actividad como la venta por internet. Es un mercado emergente cuya última regulación data del pasado mes de julio, lo que explica que hoy, en todo Aragón, solo haya tres farmacias que vendan productos por internet (dos en la provincia de Zaragoza y una en Teruel).

En un primer momento únicamente podían comercializar productos de parafarmacia, pero este catálogo se ha ampliado ya a todos aquellos medicamentos que se pueden dispensar sin receta. Ofrecen los mismos precios que en los establecimientos in situ, se da la opción de envío a domicilio y, cuando se superan ciertas cantidades, este incluso puede llegar a ser gratuito.