La DGA vuelve a retrasar el pago a las farmacias

El Departamento de Hacienda ha vuelto a retrasar este mes el pago de las recetas a las farmacias aragonesas. Ante la falta de liquidez, el Gobierno de Aragón no puede afrontar de momento el abono de los medicamentos que se han dispensado durante el mes de octubre. Los colegios profesionales han enviado una circular a las boticas informándoles de esta situación. El mes pasado, la DGA también tuvo que demorar este recibo, que asciende normalmente a una media de entre 24 o 25 millones de euros mensuales.

Los órganos colegiales explican a través de este escrito que el Servicio Aragonés de Salud les confirmó la semana pasada la falta de liquidez para afrontar el abono de esta cantidad. "Si bien confían en recibir en los últimos días del mes un aporte de fondos por parte del Ministerio de Hacienda que les permita pagar la facturación de las recetas", aseguran en la misiva los profesionales, que esperan recibir el dinero a finales de mes o principios de diciembre. Está previsto que Madrid transfiera a Aragón 280 millones para pagar recibos pendientes y así aliviar un poco su delicada situación financiera, pero de momento no se ha concretado cuándo llegará este montante.

Es el segundo mes consecutivo que el Ejecutivo autonómico tiene problemas para hacer frente al coste de las recetas de los medicamentos. La factura del mes de septiembre tuvo que abonarla en dos veces. Así, en el día previsto se les pagó el 77% de la cuenta y diez días más tarde, el 23% restante. Entonces, el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, se comprometió a hacer todo lo posible para tener que volver a retrasar este recibo.

Las demoras en los pagos se unen a la delicada situación financiera que han atravesado las boticas en los últimos años. Han visto cómo su capacidad financiera se ha reducido principalmente por la bajada de las ventas de parafarmacia y la reducción del precio de los medicamentos y el fomento de los genéricos. Casi el 9% de las farmacias aragonesas pasan en este momento por una situación financiera delicada, según los colegios de farmacéuticos.

Además, durante más de dos años y debido a la falta de presupuesto, el anterior Gobierno de Aragón demoró el pago de la facturación de las recetas a 50 días. Muchas entonces tuvieron incluso que pedir créditos para poder afrontar el desajuste financiero originado. Unos pocos días antes de las elecciones, el PP volvió a adelantar el abono a veinte días.