Los carburantes y las rebajas llevan el IPCa tasas negativas en agosto
La inflación interanual se sitúa en el -0,4% pero los datos anticipan que los precios cerrarán el año en positivo.
Y es que buena parte de los descensos observados en lo que va de año en el índice de precios de consumo (IPC) se deben fundamentalmente a las fluctuaciones en los carburantes y la electricidad, dos de las partidas con más peso en el conjunto. Así, el abaratamiento de los primeros en un 5,2% durante agosto, junto al descenso del 3,3% en el coste medio de la luz, hizo que la tasa anual de inflación volviera a niveles negativos (-0.4%) tras las subidas puntuales de junio y julio.
También bajaron de precio, como es habitual en la época estival por la campaña de rebajas, las prendas de vestir (-1,3%) y el calzado (-1,3%). Suficiente lastre para compensar el encarecimiento de varias parcelas de la alimentación, sobre todo en los productos frescos legumbres y hortalizas (con un alza del 4,6%), pescado (3,1%) y frutas (2,8%) y en los aceites (3,2%).
No fue lo único que subió de forma apreciable el mes pasado. También lo hicieron los hoteles y otros alojamientos (un 9,7% más), junto a los viajes organizados (3,6%). Bares y restaurantes, no obstante, solo se encarecieron un 0,1%. Y es que en las zonas más turísticas, tanto del interior como de la costa, los hosteleros admitieron que este año sí habían podido elevar sus tarifas por el incremento de la demanda.
Ahora bien, el desglose de los datos del INE revela que en los últimos 12 meses solo 18 de los 57 índices nacionales de rúbricas que recoge el instituto reflejan descensos, es decir, el 31,5%. La expectativa, por tanto, parece de recuperación de los precios a medio plazo.
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