España cae en su estreno europeo
Pau Gasol no fue suficiente para frenar a la actual subcampeona del mundo. El equipo de Scariolo careció de tiro exterior y su defensa funcionó a ráfagas.
No fue ninguna sorpresa que España, que fue de más a menos y nunca fue capaz de frenar a Bjelica, cayese ante Serbia, porque a pesar de las buenas noticias del eterno Felipe Reyes y del también incansable y atrevido Pau Ribas (tres de cinco triples), la selección de Scariolo no ofreció buenas sensaciones. Ni en la dirección, con un gris Sergio Rodríguez, ni en el tiro exterior, fiando su destino al final a buscar por dentro a su gran estrella. Y Pau Gasol sacó muchísimo rédito de su poderío interior en esos minutos de la verdad (11 puntos del pívot catalán en la recta final) en los que España, superada a partir del segundo cuarto, consiguió volver a meterse en el partido y a agarrarse a su defensa para intentar poner nerviosa a Serbia. Imposible con estos exyugoslavos tan competitivos y de tanta sangre fría.
Sin embargo, en la faceta defensiva la que siempre se entregó fue la selección balcánica, que tras verse arrolada por España en el cuarto inicial recurrió a su tremendo despliegue defensivo y a sus muchas alternativas ofensivas para dejar a Scariolo y los suyos con muy mala cara. El cansancio ya comenzó a afectar a los jugadores clave de la selección española en un tercer parcial en el que se produjo un atasco ofensivo descomunal. También lo hubo en el segundo cuarto, en el que solo Reyes y Ribas respondieron. Escasísimo bagaje para un equipo que echó mucho en falta la productividad de Rudy Fernández, y también de Pau Gasol hasta el parcial definitivo. Porque hasta entonces Pau, pese a fajarse en defensa, solo había anotado cinco puntos. Así, España caminaba hacia el abismo, porque cuando volvió a aparecer Gasol fue demasiado tarde. La selección de Djordjevic ya caminaba entonces sin remedio hacia el triunfo.
España se quedó en un preocupante 3 de 19 en el lanzamiento exterior y, salvo cuando pudo correr, que es lo que realmente le gusta, también estuvo muy negada en los tiros relativamente cómodos. Y eso que Serbia, en el primer cuarto, tuvo una desventaja de 12 puntos en el marcador (21-9). Los mismos con los que Serbia tuvo su máxima diferencia al final del tercer cuarto (50-62), cuando llegó su bombardeo exterior y una defensa efectiva. La del equipo español, sin embargo, funcionó a ráfagas. A pesar de Pau, Serbia fue mejor y demostró que es más favorita que España a presentarse en la final.