El castin de 'Promise' revoluciona Albarracín

Turcos o armenios. Esto es lo que tienen que parecer los entre 300 y 400 extras que participarán en las escenas de la película ‘The Promise’ que se rodarán durante dos semanas en Albarracín y Calomarde el próximo otoño, entre los meses de septiembre y octubre. Por ello, los empleados de la productora Babieka Films –encargada de organizar el castin de la superproducción americana–, desplazados ayer a Albarracín para realizar las pruebas de selección, no dejaban de insistir en el perfil que deben cumplir los figurantes. "Necesitamos gente de tez oscura y pelo negro y si son árabes, mejor, porque sus rasgos físicos son los idóneos", repetían Diana Magán y Nerea Herrero, ayudantes de producción.

El pabellón polideportivo de Albarracín es el lugar elegido para realizar el castin, que arrancó ayer con las pruebas para niños y continúa hoy y mañana con las de adultos –hombres y mujeres–. Aquellos que resulten seleccionados recrearán el ambiente cotidiano de una ciudad turca en 1912, en la época de disolución del Imperio Otomano, donde se desarrolla la historia amorosa de los protagonistas, a uno de los cuales dará vida el británico Christian Bale, conocido por interpretar a Batman en 2005.

Alrededor de 160 niños se presentaron ayer a las pruebas, si bien solo serán elegidos entre 50 y 80; el resto serán adultos. En la fila formada desde primeras horas de la mañana a la entrada del pabellón, caras de nervios, pero también de ilusión. Ante la posibilidad de que se formaran grandes colas, hubo quien durmió dentro del coche en el exterior del edificio para poder ser de los primeros en entrar. Otros llegaron al sitio a las 8.00, a pesar de que las tareas de selección no comenzaban hasta las 11.00. "Venimos del castin de ‘Juego de Tronos’ en Peñíscola (Castellón), donde hubo tres días de cola, y queríamos llegar pronto", explicaron una madre y una niña que fueron de los más madrugadores.

Si bien no hubo masificación, la cifra de aspirantes es elevada para una comarca castigada por la despoblación, lo que da idea de la enorme expectación que ha levantado el rodaje de la película, que movilizará en Albarracín, entre personal de producción, actores y figurantes, a unas 700 personas.

Muchos de los niños participantes en el castin, como Soraya Pérez, de 12 años, veranean en Albarracín aunque residen en otras ciudades. "Me encanta el mundo del cine. Vi el anuncio en el tablón del Ayuntamiento y no lo dudé", explicó la niña. Llegaron también de municipios próximos, como Bronchales, Orihuela del Tremedal o Teruel capital.

Otro de los pequeños, Rubén Ramos, de 8 años, no ocultó la emoción que le producía tomar parte en el castin de una película. Aunque no habrá batallas, el chaval afirmó que a él lo que le gustaría "es salir en el cine huyendo de una guerra". Los niños y adultos que resulten seleccionados como extras serán vestidos de época y cobrarán por su trabajo 60 euros por día.

"Me hace mucha ilusión ver cómo se realiza una película", comentó otro de los participantes, Pedro Domingo, de 13 años. A su lado, su padre, del mismo nombre, valoraba la importancia del rodaje para promocionar un territorio "al que solo se le conoce por el frío que hace". A Camila Samboni, de 11 años, lo que más le gustaría es "ver a los actores principales, salir en la película y verme después en el cine".

Los pequeños ya se sintieron protagonistas al ser fotografiados uno a uno bajo la luz de potentes focos por parte del personal de la productora, y ello con el fin de incorporar su imagen –en plano corto y de cuerpo entero– a la ficha del castin. "¡Mola!", exclamó una niña al entrar al pabellón y ver la infraestructura montada. Algunos de los aspirantes destacaban su experiencia teatral, como Marina Cazorla, que veranea en Bronchales, y Andrea González. "Me ha entrado el gusanillo del cine y he decidido presentarme", afirmó esta última.