Además de la contratación de Alfredo Ortuño, anunciada ayer de manera oficial, el Real Zaragoza dejó ayer lista la incorporación de otro mediocentro de perfil defensivo para su centro del campo: Erik Morán, procedente del Athletic de Bilbao, aunque la pasada campaña jugó desde enero cedido en el Leganés. El jugador, de 24 años, firmaría para tres temporadas y es una oportunidad de mercado que se le ha presentado en las últimas horas al club aragonés para sumar un futbolista en propiedad, aunque el Athletic se ha reservado una opción de recompra en la operación. Morán se unirá a Wilk, Dorca y Diamanka para cerrar la demarcación de mediocentros, todos ellos con un perfil más físico o defensivo que creador, más pivotes que organizadores.

Además, Tarsi Aguado, del filial, otro jugador de esas características aunque con mejor trato de balón, está siendo uno de los mejores futbolistas de la pretemporada del Real Zaragoza y tiene muchas opciones de contar con cierto protagonismo en el primer equipo si mantiene su actual línea de trabajo y juego, al ser muy del gusto de Popovic. El Zaragoza se ha decidido a acometer la operación de Erik Morán después de que el entrenador serbio haya decidido que Aria Hasegawa, que también puede jugar en el puesto aunque con mayor capacidad creativa, será utilizado principalmente en la mediapunta.

Erik Morán es un mediocentro formado en Lezama. Subió al primer equipo con Marcelo Bielsa, como potencial reemplazo de Ander Iturraspe. Es un jugador alto, de 1,87, con cierto motor para la posición. Después de no contar con continuidad en Primera División la pasada temporada, salió cedido al Leganés, donde coincidió con Marc Bertrán y Diamanka. Allí fue un jugador principal, con 17 partidos disputados.

Mientras, Alfredo Ortuño fue presentado ayer en La Romareda. El delantero llega al club aragonés en calidad de cedido por Las Palmas, conjunto con el que consumó el ascenso a la élite, el pasado mes de junio, precisamente contra el Real Zaragoza. El delantero, de 24 años y 1,84 metros, inició la temporada con el Granada y disputó cinco partidos de Primera División con los andaluces; pero se marchó a Las Palmas en enero, aprovechando la apertura del mercado invernal, y con los grancanarios anotó cuatro goles en 17 partidos.

De esta forma, el cuadro zaragocista ya ha reforzado su plantilla con hasta diez nuevos jugadores: el portero Manu Herrera; los defensas Marc Bertrán e Isaac Carcelén; los centrocampistas Aria Hasegawa, Wilk, Diamanka, Erik Morán y Jorge Díaz; y los delanteros Ángel Rodríguez y Alfredo Ortuño. Sin embargo, en la plantilla aragonesa aún quedán importantes asuntos por resolver: desde la adquisición de "al menos dos o tres nuevos refuerzos", tal y como anunció ayer el director deportivo del club, Ángel Martín González, hasta la salida de algunos futbolistas cuyos salarios resultan inasumibles para la entidad. Se trata de Javi Álamo, Abraham y José Fernández, quien está cerca de marcharse al Oviedo. Además, otros futbolistas como Rubén, Lolo y Pablo Alcolea también podrían abandonar el club, ya que se considera que su coste es elevado teniendo en cuenta el rendimiento ofrecido o su posición jerárquica en la plantilla.

Para el diseño de su plantilla, el Real Zaragoza maniobró el pasado año sobre un umbral cercano a los 2,8 millones de euros. En el presente curso manejará un presupuesto ligeramente superior, lo que allanará el camino de los futuros refuerzos. "No sé con exactitud cuántos fichajes quedan por llegar. Si encontramos gente que pueda ayudarnos, está claro que intentaremos su contratación. En cualquier caso, al menos dos o tres futbolistas sí tienen que venir para reforzar la plantilla", sostuvo Martín González, quien confesó que las negociaciones para la cesión de Bono "están ahora un poco más avanzadas" con el Atlético de Madrid.

Por el contrario, admitió que el Real Zaragoza "sigue trabajando para lograr la continuidad de Jaime y Willian José", dos prioridades para apuntalar la zona de vanguardia. "Nos gustaría que ambos siguieran con nosotros, aunque no es nada sencillo –advirtió el director deportivo del Real Zaragoza–. Con Ángel y Ortuño, creo que hemos resuelto bien la punta del ataque. Son jugadores diferentes que nos pueden ofrecer distintas alternativas; pero esto no anula la llegada de William José, quien puede jugar de delantero, de mediapunta e incluso en la banda".

Martín González también se refirió a las salidas. "De momento, todo está como días atrás. En este tema no vamos a profundizar hasta dentro de una semana, ya que ahora estamos centrados en lo que le falta al equipo. La prioridad es tener un once competitivo con la mayor prontitud posible", subrayó.

Por último, el director deportivo tuvo palabras para el canterano Tarsi, protagonista del primer amistoso de la pretemporada, ante el Deportivo Aragón. "Que los jugadores de la cantera vayan ganándose un sitio en el primer equipo, para nosotros supone mayor prestigio".

Mientras tanto, el Real Zaragoza también solucionó anoche los últimos flecos de la negociación por contar un año más con los servicios del guardameta Bono, que hoy podría incorporarse a la concentración de Boltaña.