La duración de la mitad de contratos temporales fue de siete días en 2014

Juan García Blasco, catedrático de Derecho del Trabajo y experto del CES, pide redoblar los esfuerzos públicos y privados para mejorar la calidad del empleo.

El catedrático de Derecho del Trabajo Juan García Blasco, que preside la comisión que elabora cada año la 'Memoria socieconómica y laboral de España', en una imagen de archivo en la Universidad de Zaragoza.
La duración de la mitad de contratos temporales fue de siete días en 2014
T. galán

La tasa de desempleo tiene que bajar mucho más para que realmente se note la incipiente recuperación. Así lo cree Juan García Blasco, catedrático de Derecho del Trabajo de la Universidad de Zaragoza y experto del Consejo Económico y Social (CES), que preside la comisión de este organismo que elabora cada año la memoria sobre la situación socioeconómica y laboral de España. "En la de 2014, el paro se redujo en 477.900 personas, un –8,1%. Eso es bueno, se crea empleo, pero ¿de qué tipo?". Con una tasa de temporalidad del 24,2%, lo que predominan son los contratos temporales de escasa duración –la media es de 53,3 días– con tiempos aún más bajos en los contratos de obra o servicio, eventual e interinidad, donde la duración puede ser inferior al mes.


Aunque la memoria del CES de 2014 precisa que es difícil medir con certeza la distribución por duraciones de todos los contratos temporales por el alto peso (39,9%) que mantienen los de duración indeterminada –en concreto bajo la modalidad por obra o servicio y bajo la de interinidad–, lo que sí resulta evidente es que "el contrato eventual, que supone casi la mitad de todos los temporales, el 42,4% de los realizados en 2014, tuvo una vigencia inferior o igual a siete días, mientras que el 68,7% del total de los eventuales tuvo una duración igual o menor a un mes". La ‘Memoria’ del CES hace hincapié en que "64 de cada 100 personas preferirían un trabajo a tiempo completo", destaca Juan García Blasco, lo que no quiere decir, apostilla, que "todo el trabajo temporal y a tiempo parcial sea precario". Lo que sí resulta evidente para este experto del CES es que sin más trabajo no repuntará el consumo interno y la recuperación será más lenta. "Entre 2012 y 2013, la renta media de los hogares ha disminuido en 1.000 euros, lo que se suma a las bajadas de los años anteriores dando como resultado el volumen de consumo menor desde 2007". Actualmente, denuncia Blasco, el consumo de los hogares es casi de supervivencia, ya que se centra en "pagar vivienda, alimentación y poco más". Además, "la capacidad de resistencia de buena parte de los hogares está casi agotada", añade. Por eso, García Blasco pide a la Administración, es decir, a los poderes públicos, pero también a los empresarios, que apuesten por un empleo más cualitativo que se ciña al contrato ordinario de carácter indefinido, el temporal pero muy circunscrito a circunstancias de producción y el de nuevo ingreso que incorpore a los más jóvenes.


"El empleo que se ha logrado en 2014 fue el que se destruyó en 2013 y lo ha creado sobre todo la pyme", subrayó este experto en Derecho del Trabajo, que exige redoblar los esfuerzos en creación de empleo de calidad y también no dejar de prestar atención al desempleo –revisando también los sistemas de protección–, sobre todo el de larga duración en mayores de 45 años, y al paro juvenil. "Si no atendemos estos dos frentes, la recuperación se ralentizará precisamente por este desempleo malo que tenemos en España", advirtió. "Hay que insistir más en políticas de empleo para los jóvenes y estar muy atentos a cómo se van a materializar esos 940 millones que recibiremos del Plan Juncker para empleo juvenil".


Asimismo, incide en la necesidad de suprimir obstáculos al crecimiento de las empresas. "La Unión Europea recomienda ganar tamaño y eso supondría también una mayor oportunidad de generar contratación".


El paro alimenta la desigualdad


Aún con todo, reconoce este especialista, "la elevada tasa de desempleo que tenemos supone una tremenda losa que no hace sino incrementar la desigualdad y los desequilibrios en la cohesión social". A su juicio, urge atajar este "triángulo maldito de desempleo, desigualdad y exclusión social".


García Blasco entiende que España no puede permitirse semejante tasa de paro y, por eso, reclama que se lleven a cabo "compromisos más ambiciosos de empleo estable y de conversión de contratos temporales a indefinidos", al entender que la dualidad del mercado laboral que tenemos supone "una atrofia contractual que incide y mucho en la precariedad". No obstante, este experto del CES es consciente de que "la temporalidad sin causa, como medida de ajuste, viene de tiempo atrás y costará bastante de erradicar".