Mareas de color entre autoridades

Los principales representantes institucionales de Aragón compartieron la tribuna de las Cortes con los colectivos sociales que también fueron invitados.

De izda. a dcha., Canals, Blasco, Felipe, Santisteve, Alcalde, García Vicente y Bellido, ayer.
De izda. a dcha., Canals, Blasco, Felipe, Santisteve, Alcalde, García Vicente y Bellido, ayer.
José Miguel Marco

Las camisetas de las mareas ciudadanas tiñeron ayer de color la tribuna de invitados del hemiciclo, dando todo un contrapunto al omnipresente gris de los trajes de las autoridades. La política de gestos de Podemos llevó a ceder las invitaciones de sus diputados a representantes de colectivos ciudadanos. Incluso una butaca quedó vacía, ocupada por un zapato rojo, "en tributo a las mujeres asesinadas por la violencia machista".


La anécdota graciosa de la jornada estuvo protagonizada por otro zapato, el que perdió la portavoz adjunta del PP y alcaldesa de María de Huerva, Mar Vaquero, al volver a su escaño tras jurar como diputada. Por lo demás, la sesión fue "tediosa", a juicio de varios invitados, por el interminable desfile de los parlamentarios para depositar su voto en la elección de los miembros de la Mesa.


Los invitados seguían todo desde las alturas, en una concurrida tribuna a la que acudieron las principales autoridades de la Comunidad como ocurre en todas las grandes ocasiones. En la primera fila estaban los alcaldes de Zaragoza, Huesca y Teruel, Pedro Santisteve, Luis Felipe y Manuel Blasco, respectivamente, junto al delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, el Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, Manuel Bellido, el presidente de la Cámara de Cuentas, Antonio Laguarta, y los senadores autonómicos, Ricardo Canals y Marcelino Iglesias. Este último fue el único expresidente aragonés que estuvo presente en el acto, acompañado en la lista de ex por el que fuera presidente de las Cortes Ángel Cristóbal Montes.


Tampoco se quisieron perder la cita varios parlamentarios en la legislatura recién concluida, como Adolfo Barrena, Carmen Martínez, Elisa Sancho y Maribel de Pablo. Las dos últimas se han convertido en diputadas provinciales en Huesca y como tales acompañaron a su presidente, el también socialista Miguel Gracia.


De todos ellos, el único que rompió la monocromía fue el alcalde de Zaragoza con un traje crema. Llamó tanto la atención como el hecho de que fuera el único concejal de la capital junto al nacionalista Juan Martín o que no acudieran los máximos representantes de los agentes sociales. Alguno de ellos incluso llegó a confirmar previamente su asistencia.


El exvicealcalde de Zaragoza, Fernando Gimeno, también se acercó a las Cortes y se sentó junto a la mujer del próximo presidente de Aragón, Marisa Lázaro. No llevaba corbata, tal vez porque ya no ostenta un cargo y ha vuelto a Inspección de Trabajo. Lo que no se sabe es si será por poco tiempo, porque su nombre suena para un alto cargo en la DGA.


Como es habitual en estos actos solemnes, los parlamentarios aragoneses en Madrid tampoco faltaron a la cita. En esta ocasión acudieron Octavio López, Susana Sumelzo y Rosa Santos. También lo hizo el rector de la Universidad San Jorge, Carlos Pérez Caseiras.


En la calle, el ambiente fue muy distinto al de hace cuatro años, cuando en plena resaca del 15-M los parlamentarios fueron abucheados. Ayer, unas 40 personas guardaban un respetuoso silencio y rompieron a aplaudir cuando llegaron los catorce representantes de Podemos, a los que recibieron al grito de "¡Sí se puede!". La misma consigna se repitió tras la toma de posesión de Pedro Santisteve, que generó más expectación en la plaza del Pilar que los podemistas en el palacio de la Aljafería.

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