Sánchez ve la crecida como “un problema de Estado” y tilda de “cicateras” las ayudas del Gobierno

El PSOE celebra su ejecutiva federal en Boquiñeni y propone un plan que incluye un programa de créditos e indemnizaciones.

"Un problema de Estado que necesita una respuesta de Estado". Así calificó ayer el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, los efectos de la riada del Ebro, que ha obligado a desalojar a más de 1.500 personas y ha anegado más de 20.000 hectáreas de cultivo y cientos de explotaciones ganaderas en Aragón. Tildó de "insuficientes y cicateras" las ayudas incluidas en el decreto estatal, que aprobó el pasado viernes el Consejo de Ministros.


Sánchez hizo estas declaraciones en Boquiñeni, después de celebrar la ejecutiva federal en el municipio y apenas una semana después de haber viajado ya a Pradilla para conocer in situ los efectos de la crecida del Ebro. El socialista aprovechó también para cargar contra "la inacción" del Gobierno de España y "la descoordinación" de los gobiernos autonómicos. En este sentido, censuró la visita de Rajoy que –a su juicio– resolvió en una reunión "improvisada"de 20 minutos con alcaldes después de que él le instara a "pisar el barro". Denunció que demostró "una actitud displicente y un desinterés por los colectivos que sufren este desastre". Por eso, lo conminó a que "tome los mandos de una crisis que no ha acabado".


Los socialistas propusieron un plan de actuación que incluye la creación de una comisión con todos los ministerios y gobiernos autonómicos afectados y liderada por el presidente de Gobierno para dar "una respuesta inmediata"; indemnizaciones y medidas fiscales y laborales; un programa de préstamos a través del Instituto de Crédito Oficial; la reparación urgente de las infraestructuras, y hacer efectivas las ayudas de 2013.


Sánchez defendió la limpieza del río y la necesidad de implantar directivas europeas pendientes como la relativa a inundaciones. La propuesta socialista plantea también retirar defensas o desplazarlas y conseguir un "territorio fluvial de suficiente anchura". El socialista explicó que este plan se articulará bien a través de enmiendas al decreto si se tramita como proyecto de ley o de iniciativas parlamentarias en el Congreso y en los Parlamentos autonómicos. Mañana, el secretario general del PSOE-Aragón, Javier Lambán, presentará un plan para el Ebro en el que se incluirán medidas para tratar de prevenir daños.


Sánchez estuvo arropado, además de por Lambán, por las candidatas de Navarra y La Rioja, María Chivite y Concepción Andreu, respectivamente, y por un nutrido grupos de alcaldes socialistas de la ribera (mantuvo una reunión con ellos) y otros cargos como el candidato y concejal del Ayuntamiento de Zaragoza, Carlos Pérez Anadón; el portavoz de las Cortes, Javier Sada;la secretaria de Organización, Pilar Alegría, y varios diputados provinciales.


Lambán dijo que de Rudi y Rajoy "solo caben esperar desaires" y desprecios a los ciudadanos" y destacó que sin los alcaldes y los ayuntamientos "la catástrofe hubiera sido mayor". Chivite resaltó "la cercanía e inmediatez de actuación del PSOE"y Andreu prometió "hacer fuerza ante un gobierno sin ilusión". Pérez Anadón anunció que desde el Ayuntamiento de Zaragoza se van a coordinar todas las afecciones del casco urbano y los barrios rurales y que hoy se celebrará una reunión.


La presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, acusó a Sánchez de "buscar solo rentabilidad política", afirmó que Rajoy "cumplió sobradamente"y dijo que en 2007 Zapatero no viajó a la Comunidad.