2015 será un año para seguir invirtiendo en Bolsa, aunque con más volatilidad
Los expertos creen que la renta variable puede ser el activo más rentable, aunque habrá que prestar atención a los resultados y los riesgos políticos
"Al margen del resultado, estos acontecimientos nos recuerdan que el factor político sigue ejerciendo su influencia sobre los mercados y, de hecho, se podría argumentar que Europa se verá expuesta a un mayor riesgo político en 2015 que en 2010 y 2011", asegura Kerry Craig, de JP Morgan. 2015 será un año para invertir en Bolsa, pero esta situación se traducirá en un aumento de la volatilidad. Ante ella, Roberto Ruiz-Scholtes, de UBS, comenta que el inversor ha de ser más táctico, para aprovecharla de verdad. Teniendo en cuenta las ajustadas valoraciones a las que cotizan los activos, los tirones al alza deberían aprovecharse para vender y los tirones a la baja, para comprar.
Además de la electoral, la otra política que también afectará a los mercados será la monetaria. Si en EE. UU. los inversores estarán pendientes de cuándo se producirá la primera subida de los tipos (se espera que sea a mediados de año, aunque algunos creen que se retrasará incluso hasta 2016), en Europa la cuestión está en cuándo el BCE imitará a la Fed y empezará a comprar activos (los expertos de BBVA esperan que sea en el primer trimestre y más cerca de enero que de marzo). Los analistas advierten de que en 2015 se abrirá la divergencia de las políticas monetarias a uno y a otro lado del Atlántico. De esta situación podemos extraer una idea de inversión: la apuesta por el dólar. Miguel Ángel García, de Banca March, espera que a lo largo de 2015 el tipo de cambio se acerque al rango 1,20-1,15 dólares por euro.
En la Bolsa cotizan beneficios y, a tenor de la opinión de los expertos, en 2015 más que nunca. Como advierte Roberto Ruiz-Scholtes, este año no tendrá que haber expansión de múltiplos: las Bolsas subirán lo que lo hagan los beneficios. Si van más allá, habrá que tener sangre fría y vender. La Bolsa española no sale mal parada. Banca March estima que los beneficios de las empresas españolas pueden crecer un 22,2% en 2015, más que en casi cualquier otro mercado. Se ha de confirmar.