El PAR de Trasmoz llevará a la Fiscalía las posibles irregularidades de su ya exalcalde

?David Rabinal es el nuevo regidor tras la moción de censura que los aragonesistas presentaron contra su propio compañero.

Sin vecinos y sin el alcalde saliente. La moción de censura se votó en el despacho de la secretaria y a ella solo asistieron los otros dos concejales del PAR: el nuevo regidor, David Rabinal -izquierda-, y Óscar Aznar
El PAR de Trasmoz llevará a la Fiscalía las posibles irregularidades de su ya exalcalde
Aránzazu Navarro

El aragonesista Javier Moliner dejó de ser alcalde de Trasmoz a las 12.05 de ayer tras votarse la moción de censura que le habían presentado sus dos compañeros de grupo –el municipio solo tiene tres ediles y todos son del PAR–. Nada más acabar el pleno, el nuevo regidor, David Rabinal, anunció que tanto él como el otro concejal, Óscar Aznar, van a llevar a la Fiscalía las posibles irregularidades económicas que han provocado la destitución de Moliner.


"No voy a detallar en qué consisten esas presuntas irregularidades porque queremos que el escarnio para el pueblo y para el anterior alcalde sea el menor posible –explicó Rabinal–. No obstante, mañana mismo (por hoy) o a principios de la semana que viene informaremos a la Fiscalía de esos hechos porque nuestra obligación es defender los intereses del Ayuntamiento de Trasmoz y porque es lo que nos han aconsejado tanto en la Subdelegación del Gobierno como en la Diputación de Zaragoza".


De esta forma, será el Ministerio Público quien determine si en la actuación del ya exalcalde se aprecian o no indicios de delito. Este periódico volvió a intentar hablar ayer con Moliner sin conseguirlo, y los otros dos concejales del PAR confirmaron que a ellos tampoco les ha dado explicaciones sobre qué ha hecho con más de 4.000 euros que son del Consistorio y que le han sido reclamados varias veces sin que hasta ahora los haya devuelto.


Moliner ha sido alcalde durante más de siete años –desde las municipales de mayo de 2007–. Según sus compañeros de grupo, ha hecho "muchas cosas" por este pequeño municipio de la comarca de Tarazona y el Moncayo que tiene unos 70 habitantes empadronados. Sin embargo, desde el pasado verano la secretaria-interventora y los otros dos ediles de la corporación le han detectado posibles irregularidades económicas que han acabado provocando una moción de censura.

El dinero de un vehículo...


Según han explicado a HERALDO fuentes conocedoras del caso, la primera de esas presuntas ilegalidades se produjo a raíz de que el Ayuntamiento decidiera adquirir una camioneta de segunda mano para el pueblo. Siempre según esas fuentes, una vez elegido el vehículo el alcalde dijo que él se encargaría de comprarlo y pidió que el Consistorio le transfiriera el dinero –unos 3.500 euros más el IVA, alrededor de 4.000 euros en total– a una determinada cuenta corriente.


La transferencia se hizo en octubre del año pasado, pero los meses fueron pasando y Moliner no llevó la camioneta al municipio. Extrañados de que el alcalde les diera tantas largas, en torno al pasado mes de junio los otros dos concejales y la secretaria hicieron averiguaciones y comprobaron que el vehículo no estaba a nombre del Ayuntamiento y que la cuenta corriente que había dado el regidor era del propio Moliner.


A partir de ese momento, los dos compañeros del alcalde y la funcionaria encargada de controlar las cuentas municipales le dieron un plazo para que devolviera el dinero. Sin embargo, Moliner, que llegó a reconocer que tenía esa deuda con el Ayuntamiento, todavía no ha reintegrado esos cerca de 4.000 euros.

...y el de las fiestas


Desde el propio municipio de Trasmoz explican que esta situación se le suma el hecho de que Moliner tampoco ha aclarado qué ha pasado con el dinero que él mismo recaudó de manos de los vecinos para la celebración de las fiestas. Cada persona que colaboró puso 35 euros, y aunque no se tienen datos exactos, se da por seguro que la cantidad total supera los 1.000 euros. Sin embargo, cuando la empresa encargada de organizar los distintos actos presentó la factura y al regidor se le pidió lo recaudado para abonarla, este tampoco entregó el dinero ni dio explicaciones.


Ni el nuevo alcalde ni su compañero quisieron pronunciarse ayer sobre estas circunstancias, aunque sí confirmaron que le dieron un plazo para que devolviera el dinero que se le reclama y que también intentaron que dimitiera. "Como no fue así, presentamos una moción de censura porque habíamos perdido la confianza en él y porque en tres meses no se le ha visto por el pueblo y hemos tenido que comunicarnos con él por correo electrónico o por carta certificada", explicó Rabinal.


Desde noviembre de 2013, el ya exalcalde de Trasmoz percibió 7.129 euros brutos anuales por tener una presencia mínima en el Consistorio de 16 horas semanales. Sin embargo, esa remuneración se le retiró a finales de octubre a petición de los otros dos ediles.