Aragón

Cadenas obligatorias en 13 carreteras del Pirineo y Teruel

Las nevadas también han provocado el cierre de algunas carreteras durante las primeras horas de esta mañana.

Cadenas obligatorias en 13 carreteras del Pirineo y Teruel
L. Z.

La intensa nevada que comenzó la tarde del lunes y se intensificó durante la madrugada de ayer causó problemas de tráfico en el Pirineo y Teruel durante buena parte de la mañana. Tráfico recomendaba usar cadenas en más de 80 kilómetros de la red secundaria y se cerró para camiones la N-230 a su paso por Aragón.


Los problemas en Huesca se centraron en la zona más oriental. Fueron especialmente graves en el municipio de Montanuy y el entorno de la N-230. Su alcalde, José María Agullana, explicó que la nieve llegó con un acusado descenso de las temperaturas y una intensa ventisca que azotó con fuerza los núcleos de Bono y Aneto, donde fue necesaria la utilización de cadenas durante varias horas. La carretera estuvo cerrada al tráfico pesado hasta las 15.00 por las condiciones del túnel de Viella y sus vías de acceso.


La nieve también cayó con intensidad en Benasque. A primeras horas se aconsejaba el uso de cadenas en los accesos a los Llanos del Hospital y a Cerler, aunque los escasos vehículos que circulaban este martes no tuvieron más problema que el ocasionado por un coche que se cruzó y que provocó un retraso en el transporte escolar.


También hubo cadenas en la carretera a Bonansa, en la del Portalet, en Bielsa y en el acceso a Pineta. En Teruel, fueron necesarias cadenas en tres carreteras de la comarca de Albarracín y otras dos de la Sierra de Gúdar. La DGT también recomendó precaución en la N-211 por Bañón, si bien a mediodía las restricciones habían desaparecido.


El fuerte viento provocó, además, un pequeño susto en Jaca. Una rama cayó sobre una farola y la derribó en la avenida de Rapitán. En esta misma calle, Protección Civil también tuvo que revisar la cornisa de un edificio. Y aunque se produjeron roturas de árboles en otras zonas, desplazamiento de contenedores, caídas de cascotes o tejas de algunas edificios, no hubo que lamentar daños personales.