Los parlamentarios aragoneses defienden ahora un mayor control
Aseguran que solo giran desplazamientos por razones de su cargo, "como la inmensa mayoría", pero que sería bueno justificar el uso de las tarjetas para despejar cualquier duda
La polémica generada por los viajes privados a Canarias del diputado turolense Carlos Muñoz y del exsenador y presidente de Extremadura, José Antonio Monago, ambos del PP, a cargo del Parlamento llevó ayer a los representantes aragoneses a defender un mayor control en el uso de las tarjetas de las que diputados y senadores disponen para viajar gratis. Sin distinguir de siglas, todos aseguraron que únicamente cargan los desplazamientos que hacen por razón de su cargo, al igual que la "inmensa mayoría" de los parlamentarios.
Todos ellos disponen a su nombre de una tarjeta Renfe para adquirir billetes, de una Visa Corporate Cortes Generales para comprar billetes de avión y pagar peajes de autopista y de otra tarjeta de teletaxi para desplazarse por Madrid. Con las dos primeras no hay un límite de gasto, mientras que con la tercera cuentan con un saldo máximo anual de 3.000 euros. En ningún caso tienen que justificar su uso.
El senador y secretario general del PP-Aragón, Octavio López, señaló que solo las utiliza para desplazamientos con motivo de su actividad como parlamentario. Así, recurre a la tarjeta de Renfe para viajar en el AVE entre Zaragoza y Madrid cada vez que hay pleno o debe presidir la comisión de Economía. "Todo lo que sea mejorar el uso de las tarjetas y hacerlo más transparente me parece perfecto", dijo.
Mucho más contundente fue la senadora Susana Sumelzo, quien lamentó que por la "indignidad" de algunos se pueda cuestionar la honestidad de la mayoría de los parlamentarios. "Hace falta un mecanismo de control estricto, porque pagar un viaje privado con las tarjetas del Congreso o del Senado es robar y no se puede permitir la mínima permisividad. Así de claro", dijo.
Sumelzo señaló que solo utiliza la tarjeta de Renfe en su condición de senadora, ya que ni siquiera la emplea para pagar desplazamientos para acudir a actos políticos de partido. "Y siempre en clase turista", señaló.
La senadora aragonesista Rosa Santos manifestó que ni se le ocurriría viajar con su hijo a costa del presupuesto de las Cortes Generales, por lo que planteó que todos los parlamentarios deberían justificar sus gastos. "De todos modos, no entiendo que no salten las alarmas", dijo en referencia al hecho de que haya parlamentarios que sin ser de Canarias hayan pasado de forma recurrente cargos de billetes de avión sin que nadie llame la atención.
En la misma línea del rigor y control se mostraron el diputado de IU Álvaro Sanz y su predecesor, el nacionalista Chesús Yuste, si la autorregulación no funciona. "Hay que ser ejemplar porque es el dinero de todos", añadió Sanz.
