El alcalde de Sabiñánigo rechaza que los suelos de Inquinosa se limpien con financiación publica

Ha exigido a los titulares de la empresa que paguen estos trabajos, al ser los responsables.

Las multas podrían oscilar entre 3.000 y 6.000 euros.
El alcalde de Sabiñánigo rechaza que los suelos de Inquinosa se limpien con financiación publica

El alcalde de Sabiñánigo (Huesca), Jesús Lasierra, ha rechazado este martes que los suelos de la antigua fábrica de lindano que la empresa Inquinosa tenía en este municipio altoaragonés se limpien con financiación pública y ha exigido a los titulares de esta parcela privada que paguen estos trabajos, al ser los responsables del problema.


Jesús Lasierra ha declarado a que "llevamos desde finales de los años 90 pidiéndoles que actúen y ellos hacen oídos sordos, no han hecho absolutamente nada".


El alcalde, acompañado por representantes de todos los Grupos del Ayuntamiento, se ha reunido este lunes con el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Modesto Lobón, la directora general de Calidad Ambiental, Pilar Molinero, el director del Instituto Aragonés del Agua, Alfredo Cajal, y el gerente de SARGA, Enrique Martín, encuentro en el que se ha acordado solicitar al juez que ordene el derribo de la antigua fábrica y la descontaminación de los suelos.


Los representantes municipales han pedido al Ejecutivo que elabore un proyecto técnico global.


Lasierra ha indicado que "quien contamina paga" y ha reclamado al Gobierno regional que busque a "los culpables" para que paguen tanto la indemnización como el derribo y la descontaminación.


Ha recalcado que la antigua fábrica "es una propiedad privada" y corresponde a los responsables actuales --una multinacional a la que perteneció Inquinosa, que ha cesado su actividad-- financiar los gastos.


Lasierra ha expresado que no debe haber una "lucha política", sino que "tiene que ser un trabajo de todos" y ha sugerido al Ejecutivo que actúe con rapidez, transparencia y claridad.


Ha rechazado el "alarmismo", indicando que "no hay ningún problema" con el agua corriente de Sabiñánigo, que se toma del río Aurín, a 7 kilómetros de la ciudad y en el Gállego, a la misma distancia aguas arriba.