«Es vergonzoso que Picabea tenga ahora 18 días de permiso y la Justicia haya olvidado mi caso»

El comandante Miguel Ángel Madariaga, víctima de ETA, presenta una queja al Consejo General de Poder Judicial

Miguel Madariaga.
«Es vergonzoso que Picabea tenga ahora 18 días de permiso y la Justicia haya olvidado mi caso»
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El comandante de la Guardia Civil Miguel Ángel Madariaga cumplió ayer años, y coincidió con el exmiembro de ETA, Kepa Picabea, que hizo 59 el pasado lunes, con quien se entrevistó el pasado 26 de marzo en la prisión de Zaballa (Álava) por el atentado que sufrió en 1979. Esta paradoja llevó a enterarse a la víctima de que el juez de Vigilancia Penitenciaria José Luis Castro, que autorizó su encuentro con el preso, acaba de concederle a Picabea un permiso de 18 días de libertad estos días, a pesar de tener una condena de 192  años, para celebrar su cumpleaños. En los casi cinco meses transcurridos del encuentro, en el que Kepa Picabea reconoció haber pertenecido al comando Adarra que cometió el atentado de Madariaga en la casa cuartel de Andoain, la Audiencia Nacional no ha avanzado. 


«Es vergonzoso que el juez Castro le haya concedido un permiso de 18 días a Picabea para salir de la cárcel y la justicia olvide mi caso, a pesar de que fui a entrevistarme con él en la prisión y me contó lo que nadie le había preguntado en los tribunales. Se negó a prestar declaración y luego mando una carta de disculpa. Pero la cinta grabada de ese encuentro no ha sido transcrita todavía, solo se ha utilizado mi encuentro en el crimen del estanquero de Eíbar, un caso que está prescrito, y nada avanza de lo mío», critica  Miguel Ángel Madariaga.


La víctima de ETA ha escrito una carta abierta a la sociedad española en la que denuncia la deslealtad del Gobierno y de las instituciones para una víctima del terrorismo. Madariaga ha enviado la misiva como una queja al Consejo del Poder Judicial (CGPJ), aunque aún no ha recibido respuesta. 


El comandante aragonés en la reserva, que sufrió un ametrallamiento y lleva una bala incrustada todavía, apunta en la carta que «el etarra Kepa Picabea está acogido a la Vía Nanclares, reconocer los hechos sería una condena para él pero si no colabora tendrían que sacarle de allí». 


«El resultado de mi esfuerzo personal, que para mí fue un sacrificio enorme, se resume en un escrito de la fiscalía, en el que, sin escuchar la cinta, solicita que la causa continúe en el archivo», destacó Madariaga.


La víctima resalta que Picabea contestó a sus preguntas, lo que no hizo ante el juez de la Audiencia Nacional cuando lo interrogaron por vídeo conferencia. «Salí con la esperanza de que la Fiscalía de la Audiencia Nacional hiciera el resto. La entrevista se grabó en presencia del director de la cárcel. Solicitada la aportación de la cinta a la causa, la fiscal no apoya la entrega al Juzgado. Han pasado casi cinco meses y tras conversaciones con todas las personas implicadas, no tengo más que inexplicables respuestas sobre la cinta», describe la víctima su situación judicial kafkiana.