Ocho apellidos aragoneses

Quizá los apellidos de origen aragonés no sean tan reconocibles como algunos vascos(Ibarretxe, Urkullu, Arguiñano...), pero no tienen nada que envidiarles. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), Gracia, Gascón, Pueyo, Castán, Lacasa, Ara, Allué y Escartín serían los ocho apellidos de origen aragonés más comunes en el conjunto de España. Aunque hay muchísimos más naturales de esta tierra, sin ir más lejos, Ballarín, Puértolas, Lanau, Viñuales, Abadías, Broto, Gállego...

Gracia gana por goleada al resto porque está presente en los primeros o segundos apellidos de más de 60.000 residentes en toda España. Según diversos diccionarios heráldicos consultados, todo indica que surgió en casas de municipios como Jaca, Benabarre, Barbastro..., y que luego se fue expandiendo por otras regiones. Por detrás de Gracia estaría Gascón (que llevan 19.365 personas) y luego Pueyo (10.171).

El problema es que la investigación heráldica es muy compleja y en ocasiones surgen muchas dificultades para determinar con absoluta certeza dónde apareció por primera vez un apellido. Solo hay que pensar que algunos pudieron crearse por la misma razón, en una misma época en diferentes casas de municipios muy lejanos y un largo etcétera. A todo ello hay que sumar las dificultades que traen los cambios de residencia y los casamientos producidos durante siglos para llegar al inicio de un árbol genealógico.

Por ejemplo, hay discusiones sobre cuál es el origen del apellido Royo: unos hablan de que primero apareció en la actual Navarra y otros, en Aragón. De hecho, en diccionarios de heráldica aragonesa se recogen varias casas de la actual Comunidad donde pudo surgir este apellido, que está muy extendido por toda España: 29.008 personas lo tienen de primero o de segundo, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Algo parecido ocurre con el apellido Blasco, también común y presente en todo el país, y que algunos creen que surgió por primera vez en la Jacetania, mientras otros defienden que es navarro.

Cómo surgen los apellidos

Los apellidos españoles actuales se crearon de muchas formas. Siendo muy simplistas, se puede decir que los más extendidos a nivel estatal son los patronímicos, que son aquellos que vienen de un nombre propio. Aquí se engloba los que terminan en el sufijo ‘ez’ (Martínez, de Martín; Fernández, de Fernando) y también los que no han variado con respecto al nombre propio (Martín, Domingo...).

En Aragón, estos apellidos también son los más extendidos: los más presentes entre los residentes en la Comunidad –ya sean de primero, de segundo o de los dos– son García, López, Pérez, González, Rodríguez, Martín... En la provincia de Zaragoza, ganan los García; en la oscense, los López; y en Teruel, los Martín.

Otro tipo de apellidos son los toponímicos, que derivan del lugar de nacimiento o residencia (Zaragoza, Sevilla, Soria, Aragonés, Broto...), accidentes geográficos (el aragonés Gállego, del río)... También están los que vienen de un oficio (Herrero, Alcalde, Zapatero) o que surgieron de apodos o de descripciones físicas (Rubio, Moreno, Calvo...).