Una vida dedicada a la ginecología

"Fue un avance fundamental. En materia de recursos, de instalaciones, de técnicas, de personal... Fue el principio de una nueva e importantísima época en la medicina. En estos 50 años hemos avanzado más en ella que en los dos últimos siglos". Así explica Ramón Lanzón, el que fuera jefe del Servicio de Ginecología del Hospital Materno Infantil durante 25 años, lo que supuso para la Comunidad la inauguración del área de Maternidad, que tuvo lugar el 15 de diciembre de 1971.

El doctor, que fue responsable del servicio hasta 2011, se incorporó como médico adjunto al centro el mismo día de la apertura. "Lo recuerdo con mucho cariño. Yo estaba trabajando en la quinta planta del hospital general, donde se practicaban los partos de la sanidad pública, y me trasladé allí. De pronto teníamos dos quirófanos nuevos, cuatro salas de parto y otros muchos servicios", indica el también miembro de honor de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia.

Entre los hitos de su trayectoria, Lanzón destaca que el servicio fue creciendo con la creación de una serie de unidades "muy demandadas por las mujeres aragonesas", como la de prevención y diagnóstico precoz del cáncer de cuello de útero o la de anticoncepción, un tema que constituía "un auténtico tabú" en los setenta. "Fue muy importante el paso, porque montamos reuniones con líderes de ámbito nacional y ayudamos a muchas mujeres con ello, haciendo revisiones de manera continua", apunta el médico. A este respecto, también se instauraron áreas destinadas al cuidado de la mujer en edad posmenopáusica y se participó en los protocolos de detección del cáncer de mama con la realización de mamografías periódicas.

"Asimismo, se creó una unidad de patología mamaria, que hasta el momento ha intervenido a cientos de mujeres con cáncer de mama con las técnicas modernas que conlleva la cirugía conservadora, que trata de ser totalmente respetuosa con la mama de la mujer", afirma el ginecólogo. Igualmente, se hizo mucho hincapié en la cirugía oncológica de los distintos cánceres del aparato genital femenino, siendo en este sentido un servicio puntero a nivel nacional.

Otro de los cambios significativos fue la instauración de guardias presenciales. "Antes, en los partos las guardias eran localizadas, siendo más complicado contactar con el médico si surgía alguna dificultad", señala el doctor, quien también pone de manifiesto los progresos que han tenido lugar en lo relativo a las técnicas en los partos, "que han mejorado mucho, pues se ha ido hacia una asistencia más humana con la implantación de la anestesia epidural".

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