especial agenda 2030
Una solución para combatir el cambio climático y sus repercusiones
El Objetivo número 13 de la Agenda 2030 exige medidas urgentes para disminuir el impacto del hombre en el clima centradas en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero
Según los datos confirmados por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el último lustro (2015-2019) ha sido el más cálido del que se tiene constancia, alcanzando su récord en 2019. Desde los años ochenta, cada nueva década ha superado los datos de la anterior, por lo que se prevé que esta tendencia continúe a causa de los niveles sin precedentes de gases de efecto invernadero que atrapan el calor en la atmósfera.
En palabras del secretario general de la OMM, Petteri Taalas: "La temperatura media mundial se ha incrementado en aproximadamente 1,1 grados desde la era preindustrial –el intervalo que se considera representativo de estas condiciones es entre 1850 y 1900– y el contenido calorífico de los océanos ha alcanzado niveles récord". "Si se mantiene la tendencia actual en cuanto a emisiones de dióxido de carbono, todo apunta a que hacia finales de siglo el aumento de la temperatura será de 3 a 5 grados Celsius", sentencia.
Además de la temperatura, existen otros indicadores climáticos que registran datos preocupantes, como el CO2 atmosférico, el contenido calorífico de los océanos y su acidificación, el nivel del mar, el balance de masa de los glaciares y el hielo marino en el Ártico y la Antártida. En los últimos 5 años, todos estos han mostrado una aceleración, según se apunta en el informe final sobre el cambio climático 2015–2019, publicado con motivo de la celebración del 50º Día de la Tierra.
Además de afectar de manera nociva a la salud del planeta, el cambio climático está perjudicando a todos los continentes y a todos sus países, alterando las economías nacionales y la vida de sus habitantes. A pesar de que se estima que las emisiones de gases de efecto invernadero caerán alrededor de un 6% en 2020 debido a las restricciones de movimiento y las recesiones económicas derivadas de la pandemia de la covid-19, este dato apunta a una mejora tan solo temporal. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos es un propósito que los países deben establecer de manera inamovible tanto en el corto como en el largo plazo.
A través del Objetivo de Desarrollo Sostenible número 13 de la Organización de las Naciones Unidas, denominado ‘Acción por el clima’, se insta los países, organizaciones y entidades a adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
Las metas a las que aspira este Objetivo son, por un lado, fortalecer la resiliencia y la capacidad de adaptación a los riesgos relacionados con el clima y los desastres naturales en todos los países; incorporar medidas relativas al cambio climático en las políticas, estrategias y planes nacionales; mejorar la educación, la sensibilización y la capacidad humana e institucional respecto al cambio climático, la adaptación a él, la reducción de sus efectos y la alerta temprana. Por otro, cumplir el compromiso de los países que forman parte de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de lograr para el año 2020 el objetivo de movilizar conjuntamente 100.000 millones de dólares anuales procedentes de todas las fuentes a fin de atender las necesidades de los países en desarrollo respecto de la adopción de medidas concretas de mitigación y la transparencia de su aplicación, y, por último, poner en pleno funcionamiento el Fondo Verde para el Clima capitalizándolo lo antes posible y promover mecanismos para aumentar la capacidad para la planificación y gestión eficaces en relación con el cambio climático en los países menos adelantados y los pequeños Estados insulares en desarrollo, haciendo particular hincapié en las mujeres, los jóvenes y las comunidades marginadas.
Respuesta a la covid
La crisis actual es una oportunidad para llevar a cabo un cambio profundo hacia una economía más sostenible que funcione tanto para las personas como para el planeta y que sea limpia, verde, sana, segura y más resiliente.
Por eso, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, ha propuesto seis medidas favorables para el clima que los Gobiernos pueden adoptar en estos momentos de camino hacia la recuperación: transición verde –las inversiones deben acelerar la descarbonización de todos los aspectos de la economía–, empleos verdes y crecimiento sostenible e inclusivo, economía verde, inversión en soluciones sostenibles e impuestos a la contaminación, afrontar todos los riesgos climáticos y cooperación.
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