Energía en Aragón
Hidrógeno verde, biogás y baterías: proyectos para desarrollar los combustibles del futuro
Aragón ya se ha posicionado como un referente nacional en el sector eólico y fotovoltaico. Ahora, empresas, entidades e instituciones de la Comunidad miran al futuro apostando por el desarrollo de nuevas fuentes de generación de energía.
Por su capacidad de producción, por la infraestructura actual y la prevista para los próximos años y por el carácter innovador del tejido empresarial que compone el sector. En los últimos años, Aragón se ha posicionado como un referente energético de primer nivel y, lejos de conformarse con el título, sus empresas y entidades se encuentran inmersas en numerosos proyectos y líneas de investigación para seguir creciendo en este sector y desarrollar nuevas fuentes de generación de energía que resulten más eficientes y contribuyan, además, a un futuro más sostenible.
El hidrógeno verde o el biometano son dos de las soluciones en este ámbito, nuevos combustibles con gran proyección tanto a nivel industrial como particular. La instalación de fábricas de baterías, necesarias para el desarrollo de la automoción eléctrica, es otra de las apuestas de la Comunidad.
Hidrógeno verde
La Fundación para el Desarrollo de las Nuevas Tecnologías del Hidrógeno en Aragón, puesta en marcha en 2003 con el objetivo de promocionar la utilización del hidrógeno como vector energético, participa actualmente en más de una veintena de proyectos a nivel nacional e internacional. De hecho, dos de ellos cuentan con el título de Interés Común Europeo (IPCEI), promovido por Endesa e Industrias Químicas del Ebro, en Zaragoza, y por Térvalis y Energías de Portugal, en Teruel.
Otro de los más relevantes es H2 Pillar, que pretende desarrollar la producción de hidrógeno verde por electrólisis, derivada de energía eléctrica producida por parques fotovoltaicos y eólicos para su utilización en la industria y la movilidad de gran tonelaje.
De gran interés es también la iniciativa que puede convertir a Aragón en el primer ‘hub’ europeo de hidrógeno natural: la empresa Helios Aragón planea la extracción de 55.000 toneladas de este gas al año durante los próximos 20 años -y también de helio-, en un pozo natural localizado en el entorno de Monzón. El proyecto conllevaría una inversión inicial de 900 millones de euros y la creación de 300 empleos directos y 1.500 indirectos.
Biometano
Este gas de origen renovable con características similares al gas natural se obtiene del tratamiento de los residuos orgánicos procedentes, entre otros, del sector agroalimentario. Según un estudio elaborado por la Asociación Española del Gas y las consultoras PwC y Biovic, Aragón tiene capacidad para producir anualmente 17,6 teravatios-hora (TWh), lo que equivale a un billón de vatios-hora.
El informe revela que la Comunidad podría acoger un total de 238 plantas, lo que supondría una inversión de 4.442 millones de euros más otros 341,5 millones en redes de gas. En términos de empleo, se estiman unos 2.296 puestos directos y 4.600 indirectos.
Apostar por el desarrollo de esta fuente de generación de energía supone una importante contribución a los objetivos propuestos por Europa en materia de descarbonización, además de ser una solución al tratamiento de purines, uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta Aragón en estos momentos a nivel agroalimentario, dado el peso del sector primario en la economía regional y que ya se trata del mayor productor de porcino de toda España.
En la carrera por las fábricas de baterías
La semana pasada, la ministra de Economía, Nadia Calviño, anunció en Zaragoza el segundo PERTE de la automoción, un plan de ayudas para impulsar la industria de este sector y, en especial, aquellos proyectos e iniciativas que apuesten por la movilidad sostenible. Dotado con más de 800 millones de euros, los fondos irán destinados, entre otras cuestiones, a la instalación de fábricas de baterías para vehículos eléctricos. De hecho, el gigante automovilístico Stellantis ya ha manifestado su deseo de obtener fondos para este propósito.
Con el primer PERTE, la compañía ya electrificó la planta de Figueruelas y habrá que esperar para saber si, en esta ocasión, también opta por Aragón para la puesta en marcha de una nueva planta de baterías o se decanta por la ciudad de Vigo, donde también cuenta con grandes instalaciones. Optar por la comunidad aragonesa supondría un importante respaldo al sector, especialmente tras confirmarse que el grupo Tata Motors instalará finalmente su factoría en Reino Unido y no en Aragón.
El objetivo de la Unión Europea es prohibir la venta de coches de gasolina y diésel en 2035, lo que convierte a estas factorías en una pieza esencial en el futuro del sector de la automoción y de la energía.
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