Conforme la sociedad avanza, se espera que también lo hagan las personas. Sin embargo, en lo referido a la violencia contra la mujer, ganar terreno sigue siendo una ardua labor. Las tecnologías evolucionan y, con su mal uso, acaban convirtiéndose en nuevas armas de violencia hacia las mujeres, atacando directamente a su integridad. En esta ocasión, es el turno de la Inteligencia Artificial. Pese a tener una amplia variedad de aplicaciones tecnológicas, sacadas casi de un libro de ciencia ficción, siempre hay quien decide llevar su uso por el mal camino. Así surgen los ‘deepfakes’: vídeos, imágenes o audios generados que imitan la apariencia o el sonido de una persona. Y, desde su origen, se han utilizado continuamente para abusar y acosar a las mujeres, como ha recogido en un estudio la revista ‘Wired’.

Los conocidos como ‘deepfakes’ pornográficos, contenidos sexuales generados con IA pero con cabezas de personas reales, aumentan exponencialmente, difundiéndose en redes sociales como X (antes Twitter) y Whatsapp. La cifra de casos junto al acceso gratuito a estas aplicaciones y la edad de los perpetradores, que en muchos casos son menores, llevan a cuestionarse por qué aún no se ha tipificado como delito, pero también la educación de los jóvenes. Según recoge la agencia de verificación Newtral, más allá de la actuación de los gobiernos, es vital educar en igualdad y respeto a las nuevas generaciones, que hasta la fecha, dependen de la implicación de sus profesores. Esa es la clave para que haya un cambio real.

de las imágenes generadas por Inteligencia Artificial son imágenes de pornografía no consentida.

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La revista ‘Wired’ publicó, a finales de 2023, un estudio, realizado junto a un investigador anónimo, en el que contabiliza el número de ‘deepfakes’ pornográficos en 35 de las principales webs de almacenamiento de estos vídeos de varios países. La cifra total, 244.625 vídeos, ha supuesto un aumento del 54% respecto a 2022.

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de las víctimas son mujeres. Es tan popular que tiene su propio género: ‘revenge porn’.

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El perfil de los perpetradores, recogido en 'El País', es el de hombres despechados que buscan venganza contra sus parejas, exparejas o mujeres que los han rechazado, para castigar, acosar o controlar. También están los casos de hombres que quieren difamar y humillar a compañeras, jefas o candidatas políticas para boicotear su carrera.

Casos de menores en Zaragoza

Almendralejo (Badajoz) fue el primer caso mediático de generación y difusión de fotografías pornográficas manipuladas con IA de alrededor de una veintena de sus compañeras, menores de edad, por chicos también menores, pero no ha sido el único.

Aragón ha sido la localización de varios casos. En Utebo, la Guardia Civil ha investigado a siete jóvenes por un presunto delito de pornografía infantil y otro contra la integridad moral. Los otros seis implicados en el caso son menores de 14 años y, por tanto, inimputables. Las diligencias han sido remitidas a la Fiscalía de Menores. Manipularon fotografías de hasta cinco compañeras, de entre 14 y 16 años, y no solo las difundieron por grupos de Whatsapp, sino que intentaban vender copias a cinco euros cada una. La Guardia Civil también ha abierto una investigación en la capital, tras la denuncia de varias familias de un instituto zaragozano, donde nueve chicas de 14 y 16 años podrían ser víctimas de la manipulación por IA de cinco menores de 14 años.

Casos en famosas

Taylor Swift

MARK BLINCH/Reuters

Ha sido una de las víctimas más mediáticas de esta nueva forma de violencia sexual. El 25 de enero de este año, varias cuentas de X compartieron imágenes sexualmente explícitas de la cantante generadas por IA sin su consentimiento. En el tiempo en el que la plataforma tardó en actuar, bloqueando las búsquedas relacionadas con la artista, uno de esos posts, que no se eliminó hasta 17 horas después, alcanzó más de 45 millones de visualizaciones y 24.000 reposts. Pese a que estas empresas tienen sus métodos de acción, el rastreo y el tiempo de reacción siguen teniendo lagunas.

Rosalía

EP

Esta violencia tampoco deja en paz a las artistas españolas. Rosalía fue una de las víctimas más sonadas del 2023, tras la publicación de fotografías suyas manipuladas por parte del trapero JC Reyes. La cantante tuvo que expresarse en la misma red social (X) para desmentirlas: "El cuerpo de una mujer no es propiedad pública, no es una mercancía para tu estrategia de marketing. Esas fotos estaban editadas y creaste una falsa narrativa alrededor cuando ni te conozco. Existe algo llamado consentimiento y todos a los que os pareció gracioso o plausible espero de corazón que un día aprendáis que venís de una mujer, que las mujeres somos sagradas y que se nos ha de respetar".