Cada español genera 443 kilos de basura al año

En España, se generan 443 kilos de basura por persona, según los datos arrojados a principios de año en el análisis publicado por EAE Business School, una cifra similar, aunque en ligero descenso, si se compara con ejercicios anteriores. Este dato está un 9% por debajo de la media europea, tal y como se señala en el informe, que se sitúa en 483 kilos per cápita.

Este índice, importante para revisar los patrones de consumo así como la eficiencia de los recursos a nivel industrial, se calcula tomando el dato de generación total de residuos, mezclados y separados, y dividiéndolo sobre el número de habitantes del territorio.

Aunque estos datos son, a priori, satisfactorios para el impacto ambiental en España, cabe añadir que la media española que termina en vertederos, donde se deposita la basura que no se va a tratar ni a reutilizar, es considerablemente mayor a la que se establece en Europa, con 251 kilos per cápita en España frente a los 118 kilos europeos. Estas cifras indican que el porcentaje de reciclado y aprovechamiento de los estados miembros sigue siendo significativamente superior al de nuestro país.

Siguiendo con las consideraciones del informe, la mayoría de estos residuos son generados en las etapas de distribución y consumo y se corresponden con un importante y grave desperdicio de comida.

La regla de las 'tres erres'

Se establecen tres formas de combatir el problema de la generación de residuos: reduciéndolos a través del cambio en los patrones de consumo; reusándolos y volviendolos a utilizar, por tanto; y reciclándolos o aplicando algún tipo de tratamiento para reintroducirlos en un ciclo de vida.

A este último respecto, cabe señalar que en 2020, año marcado por la pandemia de la covid-19, el peso total de envases domésticos de plástico, brik, metal y papel o cartón que se enviaron a plantas de reciclado y que fueron recuperados previamente a través de la recogida selectiva y del contenedor de resto y fue de casi 1,5 millones de toneladas, según se afirma desde Ecoembes.

Esta cifra procede de dos fuentes principales: los municipios, que son los responsables de la recogida selectiva de envases domésticos, y las plantas recicladoras encargadas de transformar esos residuos en nueva materia prima. Estas plantas son gestores autorizados por las administraciones públicas y, como tales, están sometidos a controles continuos por ellas. 

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