Dos lugares de Aragón entre los paisajes naturales más impresionantes de España
National Geographic ha seleccionado 30 enclaves que te dejan con la boca abierta.
La revista National Geographic sigue peinando la inagotable colección de bellezas que atesora España en sus pueblos y parajes naturales. En esos repasos, Aragón suele salir premiado en buena proporción, gracias a la diversidad de su oferta en este sentido; se puede decir que es una tierra perfecta para inspirar bodegones arquitectónicos y obras paisajísticas de todo tipo.
En esta ocasión, el criterio seguido por la prestigiosa publicación tiene que ver con el asombro más agradable, el que se produce ante la contemplación de la belleza natural en todo su esplendor: paisajes naturales en España que te dejan con la boca abierta. También se le llama ‘stendhalazo’, aunque eso tiene un matiz malo: cuando la belleza es muy grande y el espíritu muy sensible, resulta caso paralizante.
En la lista, de 30 referencias, hay dos aragonesas, aunque una está compartida con Cataluña por ser limítrofe entre ambos territorios: el Reino de los Mallos (Riglos, Agüero y Peña Rueba) y el Congosto de Montrebei, una lengua de agua entre la Ribagorza y Lérida con una maravilla del lado aragonés: la muralla china de Finestras.
Lo ideal, entonces, es poner el ‘asombrómetro’ en modo normal y disfrutar; primero de manera virtual y, si luego se puede, visitando todas esas localizaciones espectaculares. En el listado hay un buen grupo de elecciones canarias, que destacan sobre todo por sus paisajes volcánicos y playas de ensueño, pero no faltan (entre otros) los tesoros asturianos, andaluces, leoneses o navarros, con la famosa Selva de Irati. Como siempre ocurre con estas listas, todo el mundo echa en falta ese lugar mágico que conocen y no sale: eso es inevitable. Lo que está claro es que los citados son impresionantes.
Reino de los Mallos
Hace ya unos años que los mallos de Riglos y Agüero, junto con Peña Rueba (equidistante entre ambos conjuntos) se agruparon con fines turísticos en lo que se ha decidido llamar El Reino de los Mallos. Son una delicia para los escaladores, sobre todo los primeros en la modalidad de escalada vertical y rappel. También proporcionan en su entorno una oportunidad ideal para la marcha montañera, y los amantes de las vistas impresionantes están de enhorabuena, porque por muchas veces que los veas, nunca dejan de impresionar.
En la zona, por otro parte, han ido creciendo formas alternativas de turismo, desde el rafting en el río Gállego con Murillo como centro deportivo, a las bicicletas de montaña. Hay buena oferta de hospedaje y restauración en los municipios de la zona, desde los mencionados Peñas de Riglos, Agüero y Murillo de Gállego a Santa Eulalia o la cercana Ayerbe.
Congosto de Montrebei
National Geographic lo atribuye a Cataluña, y eso no es totalmente preciso, aunque el acceso a este impresionante paraje sea mayoritariamente catalán. El congosto de Montrebei es la línea divisoria entre Aragón y Cataluña a la altura de la Ribagorza media, un cañón fluvial de impactante belleza que tiene además unas famosas pasarelas de Montfalcó en dos de las paredes del lado aragonés. Una excursión increíble que puede organizarse desde el municipio de Viacamp, en su oficina de turismo, con el recurso del Albergue de Montfalcó para iniciar la ruta a pie y reponer fuerzas, o bien para armar una excursión por el agua en catamarán o kayak. Avanzar por el agua entre las paredes de piedra es una experiencia increíble.
Si la excursión se extiende hacia el sur, esta zona regala otra vista increíble: la muralla china de Finestras, dos hileras gigantescas de piedra que se meten en el agua como una sierra boca arriba. Un sitio para abrir la boca y no cerrarla aunque haya mosquitos cerca.
