La autorización del Gobierno de Aragón para que la Universidad San Jorge pueda impartir a partir del próximo curso 2015-2016 los nuevos grados de Magisterio de Educación Infantil y Primaria no se va a revisar. La consejera de Educación, Dolores Serrat, fue ayer tajante: "Está aprobada –dijo– y no hay margen para su reconsideración". Serrat, que participó en la celebración de San Braulio, patrón de la Universidad de Zaragoza, explicó, poco antes de que dieran comienzo los actos, que no se pueden poner límites "al deseo de expansión de una universidad privada". En opinión de la consejera, los temores mostrados por los campus públicos que imparten estos grados son infundados, ya que "la universidad pública y la privada no compiten, sino que se complementan".

Serrat recordó que ahora ya hay muchos alumnos aragoneses que salen fuera de la Comunidad a estudiar estas carreras, algo que quizá pueda evitarse o minimizarse cuando haya una mayor oferta para cursar estos grados. La consejera apuntó "el hecho diferencial" de los cursos que plantea la Universidad San Jorge, con una orientación clara hacia el bilingüismo:"La mitad de los créditos impartidos serán en inglés", dijo.

La postura de la consejera no evitó que el rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, volviera a sugerir durante su discurso en el Paraninfo que se reconsiderara esta aprobación. López mostró sus dudas sobre el carácter complementario de ambas ofertas educativas y su inquietud por el efecto que estos nuevos grados vayan a tener sobre los campus de Huesca y Teruel.

Preocupación que comparten en estas dos provincias, donde distintos colectivos se han posicionado en contra de esta medida, desde el Consejo Escolar Municipal de Teruel –que ayer mostró su total desacuerdo con la decisión de la DGA al considerar que la duplicidad de titulaciones va en contra de la política vertebradora y de asentamiento de población del territorio aragonés– hasta el propio alcalde de la ciudad, Manuel Blasco (PP) que se mostró dispuesto a convocar una reunión del Patronato Pro Estudios Universitarios para valorar la decisión de la DGA. En Huesca, PSOE y CHA se han opuesto por considerar que la medida es un ataque frontal al campus oscense.